Archivo mensual: enero 2018

Cuidado con los braseros, son peligrosos especialmente para las personas mayores

braseroEl pequeño pueblo de Cuntis se ha despertado conmocionado. Ha muerto una vecina a causa del brasero. La casa se inundó de monóxido de carbono y la encontraron en la cocina junto al brasero. La mujer, de 76 años, no contestaba al teléfono por la noche y es que había fallecido intoxicada. ni 24 horas después de que en Pedrosa de Duero, en Burgos, otra pareja de ancianos sufriera un accidente similar. Eran los padres del alcalde. La mujer seguía con vida cuando llegó la ambulancia, pero no se pudo hacer nada. No es el primer caso que les contamos estos días, los braseros pueden ser un peligro si no los vigilamos o falla su sistema de combustión. Mejor estar atentos, porque este barato sistema para calentarnos en invierno puede ser muy peligroso.

La SEGG nos recuerda los peligro del frío para todas aquellas personas frágiles:

  • Los mayores con EPOC, insuficiencia cardiaca y enfermedades neurodegenerativas tienen más probabilidades de sufrir complicaciones ante catarros y procesos gripales.
  • El aislamiento y el trastorno depresivo debido a las pocas horas de luz es uno de los mayores enemigos de las personas mayores durante el invierno.
  • La compañía, ventilar la vivienda 10 minutos al día y una correcta alimentación rica en vitamina C y D son clave para evitar los efectos negativos del frío en las personas mayores.

Con la llegada de las bajas temperaturas las personas mayores son especialmente vulnerables a la hora de contraer infecciones víricas como catarros o gripe. En concreto, los mayores con problemas cardiovasculares, respiratorios y neurodenegenerativos, como pudieran ser demencias, son los que más precauciones deben tomar ante la llegada del frío. En palabras del Geriatra Javier Gómez Pavón “En este tipo de pacientes su sistema de adaptación a los cambios de temperatura es el que está más dañado, lo que contribuye a que su sistema inmunitario se defienda peor ante el frío y pueda dar lugar a un catarro que se convierta en una gripe y la persona mayor acabe ingresando en el hospital”.

Por otro lado, casi dos millones de personas mayores viven solos en nuestro país, muchos de ellos desatendidos, recibiendo tan solo una visita mensual de alguien conocido. “Esta situación conlleva que en muchos casos nadie se entere si tienen frío o han caído enfermos debido a las bajas temperaturas. Además de suponer un mayor riesgo de caídas y por lo tanto de fracturas”, explica el Dr. Javier Gómez Pavón.

Recomendaciones para evitar contraer catarros o gripe:

  • Ventilar de 5 a 10 minutos la casa en las horas de más calor.
  • Permanecer acompañado. EL trastorno afectivo estacional debido a las pocas horas de luz hace que las personas mayores salgan menos de casa. Por ello, es importante que la persona mayor haga el esfuerzo de ir a Centros de Mayores, Centros Culturales y cafeterias; puesto que el aislamiento y el trastorno depresivo son unos de los mayores enemigos de las personas mayores.
  • Importancia de la vitamina C y D. En relación a la nutrición, lo mejor para
    combatir a las bacterias de los virus y evitar el mayor riesgo de caídas es ingerir sobre todo vitaminas del grupo C y la vitamina D, y un menú rico en legumbres y frutas, acompañado de carne y pescado. Y siempre, comer acompañado.
  • No utilizar braseros. “En cuanto sales de estar en contacto con el brasero el cambio de temperatura es muy fuerte por lo que aumenta el riesgo de contraer enfermedades víricas. Además de que producen varices en las piernas porque la sangre se concentra en las extremidades inferiores lo que produce que al levantarse se produzcan mareos e hipotensión ortostática, lo que puede desembocar en una leve pérdida de conciencia y posibles caídas”, explica el Geriatra.

Fuente: SEGG

La mayor esperanza de vida también alarga la duración de las parejas e iguala los roles

pareja mayoresLos cambios sociales suelen ser lentos, pero una vez emprendidos es difícil pararlos. Las grandes transformaciones registradas en las últimas décadas desde el punto de vista demográfico, especialmente por la prolongación de la esperanza de vida, están modificando la estructura de los hogares y, en consecuencia, los roles que cada integrante tiene en ellos. Diversos estudios ponen de manifiesto que el papel tradicional de la mujer como cuidadora principal y casi exclusiva de los familiares con alguna dependencia tiene visos de desaparecer, al menos, cuando supera los 65 años. De hecho, este fenómeno ya se ha empezado a producir. El varón está asumiendo a partes iguales (o casi) el trabajo de cuidar al dependiente, hasta tal punto que los investigadores llegan ya a hablar de “igualdad entre hombres y mujeres en el cuidado”, una tendencia que se agudizará en el futuro inmediato. Esto, indican, supondrá una auténtica revolución en el cuidado a los dependientes mayores.

Así se recoge en un capítulo del Informe España 2017 (Universidad de Comillas) sobre dependencia y cuidados, elaborado por los investigadores Antonio Abellán, Julio Pérez, Alba Ayala, Rogelio Puyol y Gerdt Sundström, quienes apuntan a la “feminización” de los hombres de más edad, “al menos en cuanto al cuidado de su pareja”.

¿Cómo se explica este cambio? Por el aumento de la esperanza de vida, que, al nacer, ya se sitúa en los 80,4 años en los varones y en los 85,9 en las mujeres, lo que se ha traducido en un incremento de la duración de las uniones de pareja, que ahora duran casi el doble –para las parejas que siguen juntas– que hace un siglo.

Así lo ponen de manifiesto los mismos investigadores (del CSIC y el INE) en el trabajo Mortalidad y duración potencial de las uniones. Según este, la duración media de la vida en común se sitúa en los 43,5 años frente a los 25 de los inicios del siglo XX, una cifra que se situaría en los 49,9 años si se equiparara la edad media de la unión (en 1920, el hombre se casaba a los 28, y la mujer, a los 25, y actualmente la edad se ha retrasado a 34 en el caso de los varones y a 32 en el de ellas).

Esto, a su vez, ha conducido a que el inicio del estado de viudedad, situado hasta no hace mucho en las edades maduras, ha pasado ahora a ser una transición propia de la vejez. Se llega a los 65 años mayoritariamente con pareja, algo que en el siglo pasado apenas se producía en un tercio de las uniones. Esto, a su vez, ha supuesto una mayor presencia de hogares de parejas sin otros convivientes en la vejez, “hasta convertirlos en mayoritarios, por encima de los hogares unipersonales. Estas tendencias, que son constantes en al menos las últimas dos décadas, se mantendrán en los próximos años”, aseguran.

La progresiva equiparación del cuidado entre hombres y mujeres en la vejez, impulsada por el creciente peso de los hogares de pareja sin otros convivientes, afectará al diseño actual de las políticas sociales, según indican los investigadores en el Informe España 2017.

Los servicios sociales normalmente intervienen en casos de personas mayores frágiles que viven solas, aunque todavía es común que las personas en esa situación de salud convivan en hogares complejos con sus familiares. “Puesto que los hogares de pareja llevan camino de convertirse en la norma y la convivencia es posible hasta una edad cada vez más avanzada, la atención formal y pública a las personas dependientes debería ser revisada consecuentemente, para no dejar cada vez más desatendidas situaciones graves encubiertas por producirse en personas con compañía y cuya salud podría verse arrastrada por las necesidades de atención a su pareja”, indican.

Fuente: La Vanguardia

Aprobada una rebaja del 32% en las tarifas de centros de día de Navarra para personas mayores

_centrodediaLa Agencia para la Autonomía y Desarrollo de las Personas del Gobierno de Navarra ha aprobado una rebaja de las tarifas de los centros de día para personas mayores, pasando de una tarifa de 463,98 euros mensuales a otra de 315,5 euros mensuales (reducción de un 32%), lo que afecta a 244 plazas públicas o concertadas.

Igualmente, se ha creado una nueva tarifa de media jornada a un coste de 160 euros al mes, dirigida a flexibilizar e incrementar el uso de este servicio por parte de las personas en situación de dependencia. Con estas medidas, se pretende potenciar este servicio que permite que las personas mayores dependientes puedan permanecer el máximo tiempo posible y deseado en sus domicilios.

Los centros de día para personas mayores en situación de dependencia son un servicio que el departamento de Derechos Sociales está impulsando a lo largo de esta legislatura. En la actualidad se han duplicado las plazas públicas, concertadas o con prestaciones vinculadas a servicio, pasando de 140 plazas en mayo de 2015 a contar a día de hoy con 244 plazas, de las cuales 120 plazas son plazas concertadas, 20 son públicas en el centro de día El Vergel, 57 a través de prestaciones vinculadas al servicio de centro de día, y 47 mediante prestaciones vinculadas al servicio de estancia diurna. Cabe recalcar que estas prestaciones económicas se conceden para acudir a un servicio cuando no existe plaza pública o concertada disponible.

En lo que va de legislatura, el incremento de personas en situación de dependencia que reciben algún servicio o prestación se ha incrementado en un 45,3%. Si en julio de 2015 9.258 personas contaban con prestaciones o servicios de las 13.221 personas con el reconocimiento de dependencia, hoy son 13.453 personas atendidas de las 15.261 personas que cuentan con reconocimiento de dependencia. En el último año, el incremento neto ha sido de 950 personas más activas en el sistema de la dependencia, lo que supone un crecimiento del 6,5%. Cabe destacar que este mismo año 2017 se han realizado 7.738 valoraciones y 3.812 personas nuevas se han incorporado al sistema.

Del total de personas atendidas, el 40% recibe algún tipo de servicio, sea residencial, de atención a domicilio u otros, y el otro 60% recibe prestaciones económicas. En cuanto a los servicios, destacar las 4.964 personas atendidas a lo largo del año 2017 en servicios residenciales, 492 en servicios de atención diurna (244 centros de día), las 1.338 personas dependientes que reciben servicio de atención domiciliaria o los 600 menores en situación de dependencia que reciben atención temprana.

Fuente: El Diario Vasco