Cáritas

Cáritas Diocesana inaugura este viernes los nuevos apartamentos para personas mayores en Málaga

Caritas MalagaEl obispo de Málaga, Jesús Catalá, inauguró el viernes a las 17.30 horas los nuevos apartamentos para personas mayores que llevan el nombre del que fuera obispo Ramón Buxarrais. Posteriormente visitó los Tomás de Cózar, donde los asistentes pudieron disfrutar de una exposición fotográfica, realizada con motivo de su XXV aniversario. A las 19 horas, Catalá presidió una Eucaristía de acción de gracias en la parroquia de Santiago.

El edificio Ramón Buxarrais cuenta con ocho apartamentos de un dormitorio en los que van a residir nueve personas, ya que uno de ellos será ocupado por un matrimonio. Este bloque de tres plantas consta de un patio interior y se encuentra situado en la Plaza Alfonso XII, junto al Santuario de la Victoria.

Las plazas ya se encuentran adjudicadas, incluso hay una larga lista de espera. Estas personas, también mayores de 65 años y con rentas no contributivas, han sido elegidas por su especial vulnerabilidad, y proceden, en algunos casos, de centros para personas sin hogar.

Fue donado a la institución por un particular con el deseo de que se destinase al cuidado de personas mayores. Sin embargo, ante la crisis humanitaria de los refugiados, hace dos años Cáritas decidió temporalmente dedicar el inmueble a este fin, cediendo su uso a CEAR hasta que encontrasen un lugar que reuniese las condiciones necesarias.

Antes de su ocupación, el edificio, que fue construido en el siglo XIX, necesitó importantes obras de rehabilitación de las que se hizo cargo el Instituto Municipal de la Vivienda y en los últimos meses se han realizado pequeñas modificaciones para adaptarlos a su nuevo uso, según han precisado desde Cáritas Diocesana en un comunicado.

XXV ANIVERSARIO DE ‘TOMÁS DE CÓZAR’

Igualmente, este viernes se celebrará el XXV aniversario de los apartamentos ‘Tomás de Cózar’, construidos siendo obispo Ramón Buxarrais para dar respuesta a los damnificados por las inundaciones de 1989, que causaron estragos en las viviendas más vulnerables del centro de Málaga.

Desde Cáritas han recordado que «de la noche a la mañana, antiguos corralones, ocupados en buena parte de los casos por personas de avanzada edad, fueron destrozados por las fuertes lluvias ante la impotente mirada de quienes no solo perdían su hogar, sino también las pertenencias y recuerdos de toda una vida».

Así se ordenó construir estas viviendas en un solar cedido entonces por el Ayuntamiento, comenzando la historia de los apartamentos ‘Tomás de Cózar’, situados en la calle de la que tomaron su nombre. Durante estos 25 años, 35 personas han vivido en esta comunidad de vecinos, donde el ambiente de familia, el apoyo mutuo o el rato de charla son la dinámica habitual.

Cinco voluntarios, una trabajadora y el director del centro, Alfonso Clavero, se encargan de ayudarles de muchas formas distintas. Echar una mano con las compras más pesadas, solucionar trámites administrativos, reparar pequeños electrodomésticos o, simplemente, ofrecer un poco de conversación, son algunas de las tareas que desempeñan los miembros de este equipo.

Las 12 viviendas se distribuyeron en tres plantas y cada apartamento consta de salón, cocina, dormitorio y cuarto de baño. El ascensor es otro de los elementos esenciales, dado a quien se dirigen. Para acceder a este recurso, además de la edad, son necesarios una serie de requisitos: carecer de recursos suficientes para acceder a una vivienda digna, poder desarrollar de manera autónoma las tareas cotidianas, no contar con alternativas de acogida familiar ni tener familiares a su cargo y no disponer de otras opciones por parte de las administraciones públicas.

Fuente: 20 minutos

Cáritas solicita reuniones con nueve ministros del nuevo Gobierno para abordar los retos «más urgentes»

Natalia-PeiroLa secretaria general de Cáritas Española, Natalia Peiro, ha solicitado formalmente a los titulares de los nueve ministerios relacionados con el desarrollo de la agenda social del nuevo Gobierno una serie de encuentros de trabajo para abordar de manera conjunta los retos «más urgentes» que plantean las condiciones de precariedad social de las personas acompañadas por Cáritas.

En concreto, ha solicitado encuentros con la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, y los titulares de Asuntos Exteriores, Josep Borrell; Economía, Nadia Calviño; Hacienda, María Jesús Montero; Sanidad, Consumo y Bienestar Social, Carmen Montón; Fomento, José Luis Ábalos; Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio; Interior, Fernando Grande-Marlaska, y Transición Ecológica, Teresa Ribera.

En estas misivas, que se han remitido después de que el presidente de Cáritas, Manuel Bretón, enviase su felicitación al nuevo Gobierno, se hace referencia expresa al documento de ‘Propuestas Políticas’ hecho público por Cáritas Española ante las últimas elecciones generales y cuyo contenido ha sido compartido en los últimos meses en distintos encuentros de trabajo con las distintas fuerzas parlamentarias.

En concreto, piden que se ratifique la Carta Social Europea revisada en 1996 y el protocolo adicional de 1995; que se garanticen los ingresos para los hogares en situación de pobreza severa; así como el acceso a la salud a todas las personas y el derecho a una vivienda digna y adecuada; que se garantice un empleo digno y un salario justo; y se apueste por la economía social y solidaria en la contratación pública –con cláusulas sociales y ambientales–.

También plantean que no se condicione el acceso al permiso de residencia a la obtención de un contrato de trabajo; que se garanticen los derechos humanos en los procedimientos de expulsión; que se cumplan los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y se destine en esta legislatura el 0,4 por ciento del PIB a ayuda oficial al desarrollo para garantizar la financiación de un modelo de desarrollo sostenible, con el objetivo de avanzar hacia el 0.7 por ciento.

Estas propuestas están inspiradas, por una parte, en la llamada del Papa Francisco a la última Asamblea General de Cáritas Internationalis a ser parte de «una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, antes que una Iglesia enferma por el encierro y la comodidad de aferrarse a las propias seguridades»; y por otra, en la instrucción pastoral ‘Iglesia, servidora de los pobres’, aprobada en abril de 2015 por la Conferencia Episcopal Española (CEE).

Fuente: La Vanguardia

“Grandes Expertos” es un proyecto intergeneracional que forma parte del Programa de Acompañamiento a las Personas Mayores de Cáritas Diocesana de Gerona

valor-personas-mayores-c-educaativosLa Residencia y Centro de Día de Figueras en Gerona, gestionada y dirigida por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), ha empezado a colaborar con el proyecto “Grandes Expertos” que forma parte del Programa de Acompañamiento a las Personas Mayores de Cáritas Diocesana de Gerona. “Grandes Expertos” es un proyecto intergeneracional que tiene por objetivo facilitar la cohesión social a través de la convivencia y el aprendizaje entre personas mayores y escolares, mediante actividades formativas que los mayores ofrecen en el aula, con acompañamiento, apoyo y seguimiento continuado.

Un aspecto muy importante para envejecer con calidad de vida es mantener la motivación y la sensación en los mayores de que todavía son parte de la sociedad y pueden seguir realizando actividades que son útiles y reconfortantes, tanto para ellos como para la sociedad, en general.

Actualmente, tenemos la concepción de que el envejecimiento puede conllevar la pérdida de capacidades y de independencia para realizar actividades realizadas en el día a día. Esta idea es importante, pero también deben tenerse en cuenta los años de experiencias, vivencias y esfuerzos que han tenido que realizar las personas mayores a lo largo de su vida.

Recientemente, desde Cáritas Diocesana de Gerona nos han dado la oportunidad de participar en un proyecto llamado “Grandes Expertos” que forma parte del Programa de Acompañamiento a las Personas Mayores.

El valor de la experiencia que acumulan las personas mayores es el principal activo de este proyecto que apuesta por los conocimientos y el bagaje de los mayores y que tiene como objetivo promover su participación en la sociedad, y luchar contra la soledad y la exclusión social. Por otra parte, el proyecto conjuga el valor de la experiencia con el interés que existe desde el ámbito educativo por inculcar a los más pequeños el respeto y la consideración por las personas mayores.

“Grandes Expertos” ha empezado a contar con nuevas entidades colaboradoras, como es el caso de FSC, a través de dos usuarios/as de la Residencia y Centro de Día de Figueras en Gerona que forman parte activa del proyecto, llevando a las escuelas su experiencia en dos ámbitos muy distintos, como son el de la instrucción militar y el voluntariado en una protectora de animales.

El proyecto “Grandes expertos” otorga un protagonismo a los mayores, ya que son ellos los que actúan y -con apoyo profesional- preparan intervenciones para compartir su experiencia con los más jóvenes.

Según nos explican desde la Residencia y Centro de Día de Figueras, para que estos usuarios, que han pasado a ser “grandes expertos”, pudieran integrarse en el proyecto, se llevó a cabo el siguiente procedimiento:

Una de las técnicas del programa se puso en contacto con el servicio, seleccionando desde el centro a dos usuarios/as con experiencias atractivas y con las capacidades adecuadas para poder expresar de manera autónoma su experiencia laboral y de voluntariado a los más pequeños.

Posteriormente, se les explicó a los usuarios/as y a sus familiares la temática del proyecto y se elaboró un guión a seguir el día de la presentación en la escuela.

Para finalizar, se llevó a cabo la presentación del proyecto en el centro educativo con el apoyo de una presentación para facilitar que tanto los menores como los mayores pudieran seguir la actividad con más facilidad. La presentación terminó con un turno abierto de preguntas e inquietudes expresadas por parte de los niños/as que los usuarios de la Residencia y Centro de Día de Figueras en Gerona respondieron con gran interés y detalle.

La colaboración por el momento está siendo muy beneficiosa, tanto para los mayores como para los niños/as, en este proyecto que apuesta por compartir la experiencia y bagaje de las personas mayores que tanto tienen aún por ofrecer.

Fuente: Fundación Salud y Comunidad

Los mayores sevillanos, cada vez son más, más mayores y más vulnerables

mayores_sevillaA finales de enero agentes de la Policía Nacional rescataban a un anciano con avanzados síntomas de deshidratación e inanición que llevaba diez días sin poder moverse de la cama. Ocurrió en Jerez de la Frontera pero podría haber sucedido en Sevilla, donde se reciben unas diez llamadas cada día de personas que sufren caídas domésticas y no pueden levantarse. Sin ayuda de sus vecinos, de los servicios sanitarios o de las fuerzas de seguridad, estas personas seguramente morirían en su casa entre heces y orines.

En Sevilla viven sin más compañía que ellas mismas más de 71.000 personas mayores de 64 años, de las que el sesenta por ciento son mujeres. Un porcentaje significativo de ellas tienen algún tipo de dependencia, aunque la ralentización de las ayudas les impide a menudo disfrutar de las ayudas que les pueden salvar la vida en casos extremos como el de Jerez. Unas 310.000 dependientes están en lista de espera en toda España y cada cuarto de hora una persona fallece en nuestro país sin recibir la prestación a la que tiene derecho.

Sevilla, ciudad de mayores

En 1981 un 30 por ciento de los sevillanos tenía menos de 15 años; hoy, tres décadas y media después, casi el veinte por ciento de la población de la ciudad supera los 64. Sevilla ha pasado en pocos años de ser una ciudad joven a una ciudad de mayores. Sólo en los últimos diez años, esta franja de edad ha crecido hasta los 129.483 habitantes, de los cuales el 60 por ciento son mujeres. Son 18.000 más que hace diez años y ese envejecimiento progresivo va a seguir creciendo durante las próximas décadas por los avances de la medicina y la realidad demográfica, advierten los expertos.

Los hogares en los que viven personas mayores solas han pasado del 23 por ciento al 26,5 por ciento desde principios de esta década, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

El porcentaje mayor de jubilados en soledad se concentra en Macarena, Cerro Amate y Distrito Sur, con un 36 por ciento del total de su población, mientras la tasa más baja se produce en Bellavista-La Palmera y Los Remedios, un barrio este último que ha experimentado un sorprendente proceso de rejuvenecimiento durante los últimos años.

Estas cifras han hecho saltar la alarma en Cáritas y los servicios sociales municipales. Además de la ayuda a domicilio, el delegado de Bienestar Social y Salud, Juan Manuel Flores, opina que hay que buscar «otros modelos habitacionales» diferentes a las residencias, cuya oferta de plazas públicas es muy inferior a la demanda.

Cualquier actuación pública en este campo se enfrenta, sin embargo a un parque de viviendas tan envejecido como el de Sevilla. Más de la mitad se construyó entre 1951 y 1980 y muchos de ellos son bloques sin ascensor. Los constructores no previeron que la población envejecería y que esos pisos se convertirían en cárceles para sus inquilinos.

Pisos-cárceles

De eso saben mucho los voluntarios de Cáritas, que visitan a muchos mayores de distintas zonas de la ciudad que no pueden bajar las escaleras de su bloque. «Están atrapados», comenta a ABC Pilar Galindo, técnica de esta organización sin cuya ayuda muchos mayores sevillanos a duras penas podrían sobrevivir.

«Tenemos muchos casos de mayores que tienen la relación rota con la familia, o que aun manteniéndola, por conflictos entre los hijos, no los atienden ni en el cuidado general de la vivienda ni en su higiene personal», asegura. A menudo los mayores necesitan los mismos o mayores cuidados que los niños. «Intentamos facilitar el aseo personal cambiando bañeras por duchas y evitar accidentes cambiando cocinas de gas por vitrocerámica, porque el tema del gas para calentar leche está resultando, en la práctica muy peligroso».

Para evitar frecuentes accidentes, desde esta organización se está tratando de financiar la compra de pequeños microondas que los mayores puedan utilizar para calentar leche u otros alimentos sin encender el gas. «Desgraciadamente no disponemos de recursos para atender más que una mínima parte de los casos que conocemos», reconoce Galindo.

Cáritas tiene un servicio de servicio de ayuda a domicilio que realiza en colaboración con la fundación Cardela Spínola de lucha contra el paro, que contrata a auxiliares formadas por la propia organización de la Iglesia. Por otro lado, las parroquias de cada barrio realizan actividades de manualidades, costura, farmacoterapia, ocio, manualidades, cuidados de la alimentación y de convivencia. «Hay tantos mayores abandonados sin recursos ni ayuda a dependencia que no damos abasto con nuestra ayuda a domicilio, aunque quien tiene que responder a esa realidad consideramos que es la Administración». ABC solicitó hace varias semanas al Gobierno municipal datos sobre su actuación en este campo pero no recibió respuesta.

Galindo, que trabaja a diario con los mayores en situación de riesgo, asegura que «sólo en casos muy puntuales el Ayuntamiento establece una ayuda a domicilio con carácter de urgencia» y que «los servicios sociales hacen lo que pueden pero su respuesta no está resultando efectiva».

Se mueren antes

Cáritas critica la ralentización de todos los proyectos con mayores por la ley de dependencia y que «suponen como promedio un año y medio de espera en el curso del cual algunos se mueren». Casos como el de Jerez no suelen darse en Sevilla porque funcionan la teleasistencia y los servicios de emergencias sociales, pero Galindo advierte que «no todos los mayores tienen teleasistencia».

Para su seguimiento se apoyan mucho en los vecinos de estos mayores «que nos da aviso de si hay algún problema, aunque ése no es un metodo infalible». Si ellos no lo advierten, podrían pasar horas y días en el suelo esperando a que alguien les rescate.

Cáritas también avisa de que el problema de la pobreza energética se ceba con estos mayores por su falta de recursos. «A los que podemos les ayudamos a pagar los recibos de la luz o la bombona, pero no podemos atender ni a una pequeña parte de las necesidades que detectamos», dice Galindo.

Cáritas dispone de unos 2.800 voluntarios en toda la provincia que participan en proyectos de convivencia para paliar también la soledad de estas personas. «Hay muchos casos en San Jerónimo, Pajaritos, Amate y San Pablo —cuenta—. y hay mayores que ingresan en los hospitales y que cuando le dan el alta ya no tienen condiciones físicas para volver a casa».

Galindo cuenta el caso de muchas viudas «con pagas mínimas, a las que les da un ictus y que pierden su movilidad. Otras tienen problemas respiratorios, de corazón, de azúcar y vemos a muchos matrimonios muy mayores, uno cuidando al otro. Y el cuidador también necesita ayuda, pero no la tiene», lamenta.

Fuente: ABC Sevilla

Cáritas abre su campaña de Navidad centrada en las personas mayores solas

CàritasLas diez Cáritas Diocesanas de Cataluña han iniciado hoy su campaña de Navidad para ayudar a las personas que viven en situación de pobreza bajo el lema «Esta Navidad, sé parte de la solución contra la pobreza» y que este año centrará en las personas mayores que viven solas.

Por primera vez, las diez Cáritas ubicadas en territorio catalán han hecho llegar este lema único para invitar a colaborar en la campaña con una colecta que se llevará a cabo en todas las parroquias.

Cáritas atendió el año pasado a 360.604 personas en Cataluña, un 4,8% de la población catalana, gracias a las aportaciones de 16.000 particulares, 1.000 empresas y el trabajo de casi 500 profesionales y más de 12.000 voluntarios.

«Desgraciadamente, nuestra labor social sigue siendo hoy más imprescindible que nunca, y se ha querido centrar la campaña en uno de los colectivos más olvidados de nuestra sociedad: la gente mayor», han explicado los responsables de Cáritas.

«La soledad es un rasgo común en muchas de las personas mayores que acogemos y acompañamos desde Cáritas», han añadido.

Un 60% de las personas mayores atendidas por Cáritas son personas que viven solas, «y por eso hay que trabajar para garantizarles una vida digna con el calor y el acompañamiento que ofrecemos», señala Cáritas».

 

Fuente: La Vanguardia

 

 

 

Cáritas Málaga conciencia sobre la mejora de los cuidados de personas mayores

Cáritas Málaga realiza un documental para concienciar sobre el exceso de sujeciones en personas mayores.

“Vivir sin ataduras” es el título del último documental producido por Cáritas Málaga, que sale a la luz con la intención de concienciar a la opinión pública sobre la importancia de mejorar los cuidados de las personas mayores, especialmente de las que sufren Alzheimer.

Erradicar las sujeciones

En palabras del director del Centro El Buen Samaritano de Cáritas Málaga y guionista de este documental, Patricio Fuentes, “demasiadas veces se sujeta, se ata a la persona mayor con demencia, especialmente en las residencias y centros de mayores, y eso es algo que tenemos que erradicar, buscando nuevas formas de atender a estas personas, porque las consecuencias que provocan sobre ellas el estar sujetas son muy graves”.

En la senda de impulsar unos cuidados libres de sujeciones, el documental realizado por Alberto Gauna cuenta con la participación de los mayores expertos en el ámbito nacional en cuanto a referencia ética y de buenos cuidados, como Antonio Burgueño, director técnico del programa Desatar al Anciano y al Enfermo de Alzheimer, de la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA); y la profesora de Ética en la Universidad de Deusto, Mª Jesús Goikoetxea.

Participación de varias Cáritas Diocesanas

España tiene el triste récord de ser el país con el índice más elevado de sujeciones por persona mayor. Convencidos de que es posible mejorar la calidad de vida de las personas con demencia o Alzheimer, en la realización de esta obra han participado distintos centros de Cáritas Diocesanas de toda España, que lleva a cabo de manera conjunta un programa pionero en nuestro país para eliminar en sus servicios el uso de sujeciones, desde el criterio de que cada persona sea tratada y viva según la vida que Dios soñó para ellos.

Fuente: ECCLESIA digital

Miguel Ángel Riera: «Cáritas atiende el mismo número de personas que en plena crisis, unas 1.500 en Ibiza y Formentera»

caritas-ibizaMiguel Ángel Riera, párroco de Sant Francesc y del Pilar de la Mola, ya había sido el delegado de Cáritas para Ibiza y Formentera entre 1993 y 2006. Hasta ahora ha ocupado el puesto de delegado episcopal de misiones. Ahora le propusieron volver al trabajo en Cáritas y aceptó la responsabilidad como conocedor de esta organización cristiana y para poder desarrollar la dimensión social de la Iglesia a la que se siente especialmente ligado por inquietudes y compromiso con las personas más desfavorecidas.

-¿Qué le ha movido a aceptar el puesto de delegado de Cáritas en las Pitiüses?
-La obediencia (risas)… no, en serio, realmente siempre he estado vinculado a Cáritas. Cuando estudiaba en el seminario hice, por mi cuenta, un curso de voluntariado juvenil y fui voluntario de Cáritas cuando estudiaba en Valencia. Es algo que me gusta, la dimensión social de la Iglesia es algo básico y fundamental. Como me gusta, y lo llevo en la sangre, no pude decir que no. Ahora, también dije que no podía llevarlo todo y por eso dejo de ser el delegado de misiones para ser el delegado de Cáritas.

-¿Cuáles son las funciones que tiene como delegado?
-El presidente de la institución es el obispo y éste delega en otras personas. Los objetivos son claros: que Cáritas mantenga la identidad y orientación cristiana que tiene que tener. Es cierto que la organización tiene una estructura muy consolidada, con un director, un tesorero, una secretaria y vocales con distintas funciones. Junto con el director somos los que llevamos las riendas de Cáritas. Está claro que sin ese equipo de gente el delegado no podría hacer mucho, pero es importante mi función de sacerdote dentro de la entidad.

-¿Con cuantos voluntarios cuenta Cáritas en Ibiza y Formentera?
-Unos 110 en Ibiza, en Formentera hay 4 o 5 voluntarias que son las que hacen la fase de acogida. Me explico, Formenterers Solidaris está haciendo una labor muy importante con la distribución de ropa y de alimentos, pero se veían un poco desbordados por el hecho de que no podían dar una atención específica a la gente. Ahora este grupo de voluntarias hace la fase de acogida, que es cuando alguien viene a pedir algo y se intenta detectar de dónde viene el problema. Puede ser que no tenga trabajo, que haya problemas de drogadicción o alcoholismo o que tengan un trabajo pero que el sueldo no llegue. Cáritas en esto tiene otros recursos con los que se puede contar a la hora de paliar esas necesidades. Esto en Eivissa ya se hace y en Formentera estamos en una fase incipiente, que sería una Cáritas parroquial de Sant Francesc, lo mismo que las hay en Sant Antoni, Santa Eulària, Sant Jordi y Puig d´en Valls.

-¿Qué tipos de personas recurren a Cáritas?
-Esto ha cambiado un poco, pero es lo mismo que en cualquier servicio social. Es decir, varón de entre 30 y 50 años, aunque pienso que esto del tipo está cambiando. Ahora nos enfrentamos a las nuevas pobrezas derivadas de la crisis. Hace poco miraba números y estamos atendiendo al mismo número de personas que en 2015 y 2014, en plena crisis.

-¿A cuántas personas atiende Cáritas al año?.
-Lo digo de memoria, pero mucha gente, demasiada, son unas 1.500 personas sobre las que estamos llevando un seguimiento. Sobre el perfil insisto en que ha variado, tenemos a personas que tienen trabajo pero que no llegan a final de mes, lo que hasta ahora no había sucedido jamas. Hoy en día los alquileres se disparan y el problema de la vivienda es muy grave en las Pitiüses.

-Así como en Ibiza se puede ver a personas sin techo, en Formentera no ocurre…
-Las personas que están en la calle suelen tener algún problema de drogadicción o alcoholismo y a veces de salud mental y es cierto que el albergue que tenemos no puede acoger a toda la gente que hay, por eso el Ayuntamiento de Eivissa quiere ampliar el albergue, y luego está la construcción del centro del Gorg. En este caso se trata de un centro de baja exigencia para gente que, simple y llanamente, su vida está muy deteriorada y a la que no puedes motivar para que salga de esa situación. Este tipo de casos en Formentera no se dan, bien porque viviendo en la calle en Formentera no llegarían a vivir o bien porque si vienen aquí se dan cuenta que no pueden y regresan a Eivissa. En Formentera tenemos un par de casos de personas que están viviendo en situaciones lamentables. Es impresionante que con la riqueza que hay en Formentera haya personas que vivan es una situación tan precaria aunque no estén en la calle. Gracias a Dios tienen algún tipo de cobijo.

-¿Qué le parece que en una sociedad como la pitiusa que vive del turismo, donde el lujo y el derroche son más que visibles, tengan que atender a 1.500 personas al año?
-No queremos ver la realidad. Le pongo un ejemplo: cuando hacemos la recogida de alimentos en los colegios, los padres se interesan por su destino. Cuando les explicamos que se recoge y se distribuye íntegramente en Formentera, no se lo acaban de creer. Incluso la pasada semana tuve que ir a Eivissa con el coche, al Banco de Alimentos, porque aquí nos habíamos quedado sin leche. Por eso la primera cuestión es que no somos conscientes de la pobreza. Como yo vivo bien, pienso que todo el mundo vive bien. Digamos que somos incapaces de visualizar a nuestro alrededor las necesidad reales de las personas que viven en condiciones precarias. Luego esta la manera de vivir. El Papa Francisco lo recuerda en una encíclica que dice que una de las cosas que más pobreza está produciendo es la destrucción de nuestro entorno. La opulencia también la vemos en nuestras islas, que se degradan por esos excesos, y eso deja al margen a la naturaleza pero también a la gente. Eso es una injusticia.

-Cáritas ayuda, ¿pero también denuncia?
-Sí, una de las labores claras de Cáritas es la denuncia de las injusticia. Muchas veces se ha relacionado a la organización como una entidad benéfica que ayuda a los pobres, pobrecitos…. Pero eso no es así, una de las labores principales de Cáritas es la denuncia de estas situaciones. Y lo que no ayuda nada es el dinero fácil que entra en nuestras islas, eso no ayuda en nada. Vivimos en un mundo de incoherencia en el que no nos damos cuenta de que realmente estamos en una burbuja de bienestar, de riqueza y no somos capaces de mirar más allá.

-¿Son solidarios los ibicencos y formenterenses?
-Lo somos, pero de una manera muy concreta. Nos cuesta ser solidarios como algo vital. Ahora en la campaña de Navidad, que es cuando se pide un tipo de colaboración muy concreta, somos muy solidarios. Pero el resto del año nos adormecemos. Hay pocos socios de Formenterers Solidaris, hay pocos socios de Cáritas y hay pocas empresas que se plantean ayudar, por ejemplo, que den un porcentaje de su beneficio a una entidad solidaria. Solidarios somos, pero yo diría que nos falta conciencia solidaria.

-¿No le parece que muchas veces las ayudas son para lavar nuestra mala conciencia?
-No me atrevo a decir que las ayudas solidarias son para tranquilizar las conciencias. Lo que sí digo es que nos tienen que llamar a la conciencia para que reaccionemos, Hay muy poca gente que venga durante el año y te diga: ´toma esto para ayudar a la gente pobre´. Desde Cáritas lo que planteamos es que esa ayuda sea una forma de vivir, eso sería lo ideal. Es decir, que mi forma de vivir sea la de tener en cuenta a la gente que no tiene y eso nos ayudaría, además, a controlar más la manera de consumir que tenemos. Cuando dejas de consumir tanto, equilibras las necesidades que hay en el mundo. Tenemos que ser más conscientes de lo que gastamos y de lo que tenemos

-¿Organizaciones como Cáritas existen porque la administración no es capaz de cubrir esas necesidades?
-Aunque los gobiernos llegaran a todo, seguirían existiendo las ONG. Además, creo que estamos a la cola de los países europeos en la media de gasto por habitante en servicios sociales y muchas veces ese gasto pienso que está mal distribuido.

-¿Qué quiere decir?
-Los pobres no votan, las personas marginadas no votan. Es un colectivo que no existe, no tienen ni voz ni rostro, por lo que estas personas no cuentan, son invisibles. Luego, vemos que mucho dinero se va a las personas mayores y a los viajes del Imserso. No digo que eso no se tenga que potenciar, pero pienso que la distribución del dinero para servicios sociales tendría que ser otra. Cáritas es la voz y el rostro de los que no tienen ni voz ni rostro.

Fuente: DIARIO de IBIZA