Crónicos

«De la Ciencia a la Salud», cómo acortar el largo ciclo que va de la investigación científica a la práctica clínica

MasPalop-Acupuntura2Con el lema «De la Ciencia a la Salud», la Universitat Politènica de València (UPV) acogerá el próximo martes, 28 de abril, la presentación de la Cátedra de Innovación Clínica, en la que se reflexionará sobre cómo acortar el largo ciclo que va de la investigación científica a la práctica clínica.

Reducir la incidencia de los efectos secundarios de los tratamientos convencionales de los procesos oncológicos para mejorar la calidad de vida de los enfermos, así como reducir su presencia en los servicios de atención urgente de los centros sanitarios, son dos de los resultados más directos que tendría una implantación progresiva de la llamada oncología integrativa en la sanidad pública, según ha explicado el  biólogo y asesor científico del Instituto Mas Palop, Juan Serrano Gandía.

El objetivo es incorporar las terapias no convencionales como un suplemento a las prácticas de la llamada medicina tradicional o convencional, esto es, incorporar una visión global del paciente y los efectos de los tratamiento que recibirá, abordándolo desde la nutrición, la homeopatía, la fitoterapia y los aspectos emocionales, con el objetivo principal de minimizar la problemática asociada a tratamientos agresivos para el cuerpo como la cirugía, la quimioterapia o la radioterapia, entre otros, según el asesor científico del Instituto Mas Palop.

De esta forma, se incrementa la calidad de vida del paciente durante el proceso y se reduce su presencia en las urgencias sanitarias como consecuencia de estos efectos colaterales, que son previsibles y tratables de forma paralela, tal y como ha explicado Juan Serrano Gandía.

Para ello, existe una amplia gama de terapias no convencionales, de probada eficacia científica -quiromasaje, drenaje linfático, reiki, etc.-, que ya se han empezado a implantar en los principales centros médicos de referencia del mundo, caso del Johns Hopkins Hospital de Baltimore (Maryland), o el Hospital público Puerta de Hierro de Madrid, en sus tratamientos a pacientes con procesos terapéuticos de larga duración.

Abordar las enfermedades crónicas y, particularmente el cáncer, de manera integrativa, tratando al paciente en su totalidad y no sólo como un organismo portador de un tumor, permitiría aliviar la congestión de los servicios de urgencias y también reducir el efectos de los tratamiento agresivos en los pacientes, según ha explicado el asesor científico del Instituto Mas Palop, que ha señalado que se trata de un modelo de asistencia médica basado en la evidencia, es decir, en pruebas científicas que tengan en cuenta todos los niveles del ser y de la experiencia de las personas que buscan volver a un estado de bienestar.

Valencia sede de las terapias avanzadas

Con el lema «De la Ciencia a la Salud», la Universitat Politènica de València (UPV) acogerá el próximo martes, 28 de abril, la presentación de la Cátedra de Innovación Clínica, en la que se reflexionará sobre cómo acortar el largo ciclo que va de la investigación científica a la práctica clínica. Para ello se celebrarán tres mesas redondas abordando algunos de los temas más candentes sobre esta cuestión: terapias avanzadas, big data en sanidad y de la ciencia a la salud.

La Directora General de Innomedyx, Centro de Investigación Traslacional en Medicina, Rosa Valenzuela, presentará junto con el Director Científico de Centro de Reconocimiento Molecular y Desarrollo tecnológico (IDM), Ramón Martínez Máñez, el plan de actividades que se pretende desarrollar para cumplir con los fines de la Cátedra. Además del rector de la UPV, Francisco Mora, durante el acto intervendrá Jesús Fernández, Director General del Instituto de Salud Carlos III, que moderará la primera de las sesiones, centrada en Terapias Avanzadas.

Juan Fernando Muñoz, Subdirector General de Tecnologías de la Información del Ministerio de Sanidad, se pondrá al frente del segundo de los foros, que abordará la integración de biodatos en el historial de los pacientes y las posibilidades que ofrece el almacenamiento y tratamiento de la ingente información clínica que se genera desde los distintos ámbitos asistenciales (Big data sanitario). El profesor de la Universitat Politècnica e investigador del IDM, José Ramón Murguía moderará la sesión que clausurará el evento con un lema que refleja plenamente el objetivo de la Cátedra: De la ciencia a la salud.

Además de estos debates, el doctor Julio Mayol, director de Innovación del Hospital Clínico San Carlos de Madrid y profesor titular de la Universidad Complutense, ofrecerá una ponencia relacionada con la investigación y su aplicación real en el entorno clínico.

La Cátedra de Innovación Clínica se configura  con el objetivo de promover y favorecer la colaboración en la investigación sanitaria y biomédica para transformar los conocimientos en resultados y así contribuir a mejorar el diagnóstico, el tratamiento y la gestión de las enfermedades de la forma más rápida y eficiente posible.

Las residencias recibirán a 600 enfermos crónicos cada año ingresados en hospitales

Hay enfermos crónicos para quienes son más útiles, y por tanto convenientes, los servicios que ofrece una residencia socio sanitaria que los propios de un hospital. Al parecer ese es el planteamiento que inspira la decisión de Sanidad de derivar a residencias a pacientes ingresados en hospitales de crónicos. La medida, que todavía no tiene fecha para su puesta en marcha, afectará a unas 600 personas al año. Este es el número estimado de pacientes, según los datos de la Conselleria de Sanidad.
El ente autonómico dice que en los Hospitales de Atención a Crónicos y Larga Estancia (Hacle) se atienden a «5.000 pacientes al año, de los cuales el 12% podrían ser remitidos a Bienestar Social para su atención al cumplir tres meses de estancia».
El porcentaje de derivaciones estimado por el departamento autonómico implica que unas 600 personas podrían verse afectadas por la medida. A juicio de Alberto Giménez, presidente de la Asociación Empresarial de Servicios a Personas en Situación de Dependencia, la cifra de Sanidad es asumible.
También apunta Giménez una valoración del ahorro que ello puede suponer para las arcas públicas ayudando a reducir el déficit al tiempo que «se impulsa la economía» si dejar de prestar un servicio. El presidente de Aerte asegura que atender a un enfermo crónico en un Hacle cuesta «500 euros al día, mientras que una residencia puede hacerlo por 120 euros diarios».
La diferencia del coste, siempre según Aerte ya que Sanidad no ha facilitado estos datos, es de 380 euros por paciente. Esa cantidad de dinero multiplicada por el número de enfermos que se espera derivar -600 al año- y por los 365 días del año arroja una cifra algo superior a los 80 millones de euros. Es la cantidad de dinero que según Alberto Giménez, podría ahorrarse la administración autonómica cada año.
Esa es la clave del ahorro. Atender a un paciente en un hospital siempre comporta un coste superior a la prestación del servicio en una residencia. Los pacientes que se derivarán a las residencias socio sanitarias serán los que no requieran prestaciones puramente hospitalarias, en otro caso permanecerán en el centro hospitalario.
Tanto la Conselleria de Sanidad como la de Bienestar Social confirmaron recientemente que técnicos de ambos departamentos trabajan para delimitar la colaboración ante esta iniciativa y otras con el fin de «optimizar recursos y evitar duplicidades en la prestación de servicios», pues ante determinados servicios consideran que el trabajo conjunto reduce costes. Los departamentos implicados no han dado fecha para la puesta en marcha.
El presidente de Aerte aseguró que reciben de buen grado la iniciativa de Sanidad, de hecho en alguna ocasión la habían planteado, pero apuntó que están «a la espera de que nos llamen» para iniciar conversaciones «formales y oficiales».
Se deduce que todavía no se han producido los encuentros con los empresarios de las residencias que mantienen algún concierto con la administración para la prestación de servicios. Entre las cuestiones que tendrán que analizar ambas partes se encuentran las condiciones de los conciertos, puesto que si se incluyen nuevas prestaciones los mismos tendrán que ampliarse.