Navarra
La inversión per capita en dependencia de la Comunidad Foral de Navarra es el doble que en el resto del estado
El gasto público en Navarra para atender la dependencia es de 206 euros por habitante, el doble que la media estatal. Así se desprende del primer estudio elaborado por el Observatorio Permanente de Asuntos Sociales, creado por el Gobierno foral.
La atención a las personas con dependencia alcanza en Navarra una inversión anual de 154,54 millones de euros, de los que la Administración aporta el 85 por ciento, cifra que supone un gasto público de 206 euros por habitante, casi el doble de los 104 euros de media estatal.
Esta inversión total, de la que se benefician 10.679 personas, procede del Gobierno de Navarra, en un 78% (120,17 millones); de la Administración General del Estado, en un 7% (11,58 millones); y de las aportaciones de las personas usuarias de los servicios de dependencia, en un 15% (22,77 millones).
Así se desprende del primer estudio elaborado por el nuevo Observatorio Permanente de Asuntos Sociales, presentado este lunes en rueda de prensa por el director general de Política Social y Consumo del Ejecutivo navarro, Mariano Oto.
Durante su intervención, Mariano Oto ha recordado que la Ley de Dependencia establecía, en su exposición de motivos, que la atención a las personas dependientes sería financiada por el Estado, las comunidades autónomas y las personas usuarias, aportando cada parte un 33%. No obstante, según Oto, la aportación del Estado, desde el cambio legislativo introducido en 2012, «ha sido decreciente en el tiempo» hasta alcanzar el 7%, teniendo que aumentar el Gobierno de Navarra su contribución mediante un aumento presupuestario, «especialmente en el tema residencial».
COSTE DE LA ATENCIÓN A LA DEPENDENCIA
Con este estudio sobre la inversión realizada en la atención a la dependencia en Navarra, el Gobierno foral da respuesta a la recomendación realizada por la Cámara de Comptos en 2012, ha informado el Ejecutivo en una nota.
Para realizar el cálculo se han tenido en cuenta el coste de los centros residenciales y de día (tanto propios del Gobierno de Navarra como concertados), las prestaciones económicas relacionadas con esta materia, los servicios a personas dependientes como el de asistencia telefónica o de transporte adaptado, los contratos con los centros ocupacionales, y las subvenciones para programas de promoción de la autonomía y prevención de la dependencia.
Asimismo, se han contemplado todos los niveles de dependencia, incluyendo también el ‘adicional’ (dependencia social, enfermedad mental, etc.), que es atendido en Navarra aunque no esté garantizado por la Ley de Dependencia.
De este modo, las mayores partidas son las destinadas a los centros residenciales y de día (tanto para personas con discapacidad, con enfermedad mental o mayores), que alcanza los 73,5 millones; la atención temprana de niños de 0 a 6 años, con 27,9 millones; las ayudas económicas para cuidados en el entorno familiar, con 19,5 millones; las prestaciones vinculadas al servicio (ayudas para residencias y centros de día), con 12,5 millones; y los servicios prestados por la Agencia Navarra para la Autonomía de las Personas, como el de valoración de la dependencia, con 7,8 millones.
En resumen, el 79% del coste de atención a la dependencia se corresponde con la prestación de servicios a estas personas y el 21% con las ayudas económicas que se conceden. El 95% del total se destina a cubrir el nivel mínimo exigido por la Ley de Dependencia y el 5% se dirige al llamado nivel ‘adicional’, que no está garantizado por la legislación pero que, como se ha indicado, se atiende también en Navarra.
OBSERVATORIO PERMANENTE DE ASUNTOS SOCIALES
El director general de Política Social y Consumo, Mariano Oto, también ha presentado el nuevo Observatorio Permanente de Asuntos Sociales de Navarra (OPASNA), que pretende dar respuesta a la necesidad de contar con datos y análisis continuados sobre la realidad social de la Comunidad. Asimismo, este observatorio permitirá conocer y evaluar el impacto de las actuaciones llevadas a cabo en Navarra por los diferentes agentes en materia de servicios sociales.
Desde este observatorio se pondrá en marcha una página web de acceso público con datos estadísticos, se elaborarán informes periódicos sobre determinadas materias de servicios sociales y otros específicos sobre aspectos que se consideren de relevancia, y se ofrecerán referencias documentales.
El observatorio cuenta con un presupuesto de 102.801 euros y trabajarán en él cinco personas. De ellas, tres técnicos del Servicio de Planificación, Calidad e Inspección del Departamento de Políticas Sociales, y otros dos técnicos con dedicación parcial y procedentes de otros servicios.
Asimismo, una comisión formada por el conjunto de directores de Servicio y subdirectores de la estructura orgánica del Departamento de Políticas Sociales orientará, mediante reuniones bimestrales, el trabajo que desarrolle el observatorio.
Una guía ofrece pautas para promover la atención individualizada en centros de mayores dependientes
La publicación, denominada “Guía del plan de atención individualizada a personas mayores en situación de dependencia. Atención en servicios residenciales y de atención diurna”, ha sido elaborada por personal técnico del Departamento de Políticas Sociales con la colaboración de expertos y entidades relevantes de la atención a las personas mayores.
Se compone de 13 capítulos, una introducción y un anexo con modelos de fichas para el plan de atención individual y el plan de atención del centro. A lo largo de sus primeras páginas se recoge una justificación de este proyecto, el marco legal y una definición de los centros para personas mayores como “un lugar para vivir”.
Navarra concierta 625 plazas residenciales para personas mayores, divididas en 14 centros
El Gobierno de Navarra ha autorizado, en su sesión de este miércoles, un gasto de 60,6 millones de euros durante los próximos cuatro años para concertar 625 plazas residenciales para personas mayores, correspondientes a catorce centros.
Con la firma de estos contratos, que tendrá lugar el próximo mes de abril, el nuevo modelo de concertación ¨”resideN” se habrá desplegado ya en la mitad de los centros residenciales que tiene plazas concertadas con el Gobierno de Navarra.
Concretamente, las residencias para las que se ha autorizado el gasto, por orden alfabético de localidades en las que están situadas, son las siguientes: Residencia Amma Ibañeta en Erro (25 plazas) y un presupuesto de 2.712.364 euros; Residencia Beloso Alto de Pamplona (22 plazas) y 2.543.867 euros; Residencia Amma Betelu (25 plazas) y 2.778.660 euros; Residencia Carcastillo (8 plazas) y 818.097 euros; Residencia San José de Corella (28 plazas) y 3.198.085 euros; Asilo San Jerónimo de Estella (15 plazas) y 1.650.093 euros; Residencia San Miguel de Funes (14 plazas) y 1.497.017 euros; Casa Misericordia de Pamplona (125 plazas) y 14.174.611 euros; Residencia San Miguel de Peralta, (18 plazas) y 1.878.930 euros; Residencia San José de Valtierra (29 plazas) y 3.352.709 euros, Residencia Virgen del Portal de Villafranca (10 plazas) y 1.051.032 euros. Finalmente, otras 306 plazas, con un presupuesto de 35.382.883 euros se conciertan con Amma Navarra y se distribuirán entre los centros de Mutilva, Oblatas y Argaray.
El pasado mes de diciembre, el Gobierno de Navarra autorizó ya la concertación con el nuevo modelo “resideN” de 462 plazas en otros doce centros. Sumadas éstas a las hoy aprobadas, ascienden a un total de 1.807 plazas en 26 centros, con un presupuesto global hasta 2018 de 104,6 millones de euros.
La cantidad hoy autorizada, 60.673.155 euros se distribuirá de la siguiente forma: 8.186.040 euros en 2014, 10.914.720 euros en los años 2015, 2016 y 2017, y 2.278.680 euros en 2018.
Características del programa
El “Programa ResideN” comenzó a aplicarse el pasado mes de octubre en sustitución del hasta ahora vigente Concerdep, que databa de 2009. Tiene un doble objetivo: disponer de una adecuada red de servicios de atención residencial en condiciones óptimas para asegurar la autonomía, dignidad y calidad de vida de las personas mayores y al mismo tiempo ofrecer un modelo económico más equitativo para los centros, que contribuya a su estabilidad y al mantenimiento de los puestos de trabajo.
Para ello, se han incluido nuevos perfiles de usuarios, como son los denominados dependientes sociales; esto es, personas mayores de 65 años que, sin tener un grado de dependencia, presentan una problemática familiar o personal que les conduce al riesgo de exclusión social. El número de plazas destinadas a estas personas en cada centro no superará el 5% del total.
También se da cabida de forma voluntaria a los discapacitados mayores de 65 años, cuyas necesidades de atención sean asimilables a los de un mayor con dependencia. Y se prevé la posibilidad de concertar plazas con carácter temporal.
Finalmente, se han reorganizado y simplificado los tipos de módulos, que se reducen a dos: dependientes y no dependientes, y se ha flexibilizado la contratación de determinados perfiles profesionales (cocina, lavandería y limpieza).
Íñigo Alli presenta el nuevo modelo de concierto para residencias de mayores navarras
El consejero de Políticas Sociales del Gobierno de Navarra, Íñigo Alli, ha presentado este sábado en un congreso sobre geriatría y gerontología celebrado en Vitoria el nuevo modelo de concierto económico para residencias de personas mayores que está impulsando el Gobierno de Navarra.
Este nuevo modelo, denominado ‘ResideN’ y que el Departamento de Políticas Sociales está consensuando con las residencias de personas mayores de la Comunidad foral, flexibilizará la gestión de las plazas y favorecerá su ocupación con la inclusión de nuevos perfiles de usuarios como personas discapacitadas con necesidades asimilables a las que puede tener una persona mayor dependiente y personas mayores en riesgo de exclusión social (dependientes sociales).
Este congreso, que comenzó el pasado jueves y se ha clausurado este sábado, ha sido organizado por la Sociedad Navarra de Geriatría y Gerontología y por Zahartzaroa (Asociación Vasca de Geriatría y Gerontología).
El consejero Alli ha intervenido en una mesa redonda sobre las propuestas que realiza la Administración para el futuro de la atención a las personas mayores junto con el director de Atención Primaria del Servicio Navarro de Salud, Ignacio Yurss; el consejero vasco de Empleo y Políticas Sociales, Juan Mª Aburto; y el consejero vasco de Salud, Jon Darpon.
En la Comunidad foral, ha explicado el Ejecutivo foral en un comunicado, existen 73 centros de atención a personas mayores. De ellos, dos son propios del Gobierno de Navarra, 47 mantienen plazas concertadas con el Departamento de Políticas Sociales y 23 son privados. Respecto al número de plazas, existen 5.853 de las que 2.030 son públicas o están concertadas con el Ejecutivo.
SOBRE EL NUEVO MODELO
Con el nuevo modelo de concierto económico para residencias de personas mayores el Gobierno de Navarra pretende «flexibilizar y mejorar la gestión de las plazas y facilitar su ocupación».
De este modo, según ha detallado el Ejecutivo, «los diferentes módulos de concierto existentes hasta ahora se simplifican en dos tipos: personas dependientes (que incluye tanto a los grandes dependientes como a los dependientes severos) y personas no dependientes».
Asimismo, se dará entrada en el concierto a personas mayores en riesgo de exclusión social (dependientes sociales) y a personas discapacitadas menores de 65 años con necesidades asimilables a las que puede tener una persona mayor dependiente.
Finalmente, se flexibilizará también la contratación por parte de las residencias de determinados perfiles profesionales (cocina, lavandería y limpieza) eliminando la ratio que exigía hasta ahora un número determinado de profesionales según el número de residentes.
LÍNEAS DE FUTURO
Durante su intervención, el consejero de Políticas Sociales también ha explicado las líneas por las que, a su juicio, debe evolucionar la atención a personas mayores en un futuro.
En este sentido, Alli ha considerado que las residencias para personas mayores «deben flexibilizar los servicios que ofrecen hasta el momento, generalmente atención residencial y diurna, para incluir otros como estancias temporales, de convalecencia (una recuperación post-hospitalaria, por ejemplo), apoyo a personas en domicilio o programas específicos que retrasen la dependencia».
Alli también ha planteado la necesidad de que la Administración adapte también sus recursos favoreciendo, entre otras cuestiones, «las ayudas y servicios a domicilio para la vida en el hogar, los pisos tutelados para personas no dependientes o las unidades de convivencia independientes dentro de las residencias».
Finalmente, el consejero Alli se ha referido al espacio sociosanitario que impulsa el Gobierno de Navarra a través de los departamentos de Salud y de Políticas Sociales. Con esta iniciativa, según ha dicho, se pretende «ofrecer una mejor atención a las personas con la optimización de los recursos y las herramientas existentes».
ATENCIÓN SANITARIA
Por su parte, el director de Atención Primaria del Servicio Navarro de Salud, Ignacio Yurss, ha realizado en su intervención un recorrido histórico sobre la atención sanitaria de personas mayores en la Comunidad Foral durante los últimos 30 años.
Yurss ha destacado como principales hitos la creación del Servicio de Geriatría, el desarrollo de la guía de valoración integral del anciano y el plan de atención integrada a los enfermos crónicos y pluripatológicos que está elaborando el Departamento de Salud en la actualidad.
El Gobierno de Navarra extiende a los dependientes severos las ayudas para la contratación de un asistente personal
Los dependientes severos de Navarra también podrán beneficiarse de las ayudas económicas que presta el Gobierno de Navarra para la contratación de un asistente personal. Hasta este momento únicamente podían optar a ellas los grandes dependientes.
Asimismo, se han reducido de 120 a 80 las horas mensuales mínimas del contrato para los asistentes personales. Estas son las dos principales novedades que se recogen en la orden foral del consejero de Políticas Sociales, Íñigo Alli, publicada recientemente en el Boletín Oficial de Navarra, según ha informado el Ejecutivo foral en un comunicado.
Con estas ayudas, enmarcadas en el sistema para la autonomía y atención a la dependencia, el Gobierno de Navarra pretende fomentar la vida independiente de estas personas, su autonomía personal y favorecer su permanencia en el entorno habitual.
Pueden optar a las ayudas para asistente personal aquellas personas que tengan reconocida una situación de gran dependencia (nivel 3) o dependencia severa (nivel 2), que sean mayores de edad y que desempeñen un trabajo remunerado con alta en la Seguridad Social o participen en cualquier tipo de enseñanza superior.
Asimismo, deberán tener capacidad para determinar por sí mismas los servicios que requieren, ejercer su control e impartir instrucciones a la persona encargada de su asistencia. En caso de incapacidad legal, este último requisito se exigirá a quien ejerza la guarda y custodia de la persona dependiente.
La cuantía de las ayudas, que pueden solicitarse a lo largo de todo el año, variará en función de la capacidad económica de las personas beneficiarias, calculada teniendo en cuenta tanto la renta como el patrimonio, y su grado de dependencia.
De este modo, las ayudas a grandes dependientes podrán oscilar entre los 1.214,83 euros al mes y los 485,93 y las de dependientes severos entre los 723,94 y los 289,58. En ningún caso la ayuda económica será superior al coste de contratación.
Por su parte, las personas empleadas deberán ser idóneas para desempeñar las funciones propias de asistencia personal y la contratación se realizará de acuerdo a las normas generales y con alta en la Seguridad Social.