Cuatro de cada 10 dependientes catalanes están desatendidos
Catalunya es la comunidad autónoma con más personas dependientes en lista de espera, según el último balance del Sistema de Atención a la Dependencia, que revela que casi cuatro de cada 10 dependientes (37,1%) de esta región no recibe la prestación o servicio a la que tienen derecho por ley tras ser evaluados, un dato que supera en 12,6 puntos porcentuales la media española (24,5%).
En el conjunto de España, uno de cada cuatro dependientes reconocidos está en la lista de espera. «Se confirma en el 2017 una recuperación del Sistema de Atención a la Dependencia que se inició en 2015, al calor de la sensibilidad de los nuevos Gobiernos Autonómicos y por la incorporación de los dependientes moderados (en julio del 2015)», valora la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales.
No así en Catalunya. Los datos a 31 de diciembre del 2017, a los que ha tenido acceso Europa Press, señalan que de las 224.261 catalanes reconocidos como dependientes, 83.203 están desatendidos.
Al actual ritmo, esta comunidad autónoma precisaría de más de 11 años para acabar con el ‘limbo’ en el que se encuentran estos dependientes, según la estimación de la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales.
Castilla y León, en el otro extremo
La lista de espera de Catalunya contrasta con la de Castilla y León, que ha acabado el 2017 con la práctica totalidad de sus dependientes atendidos y solo un 1,4% pendiente de una prestación o servicio.
Por el contrario, muy cerca de la comunidad catalana se sitúa Canarias, con más de un tercio de las personas dependientes sin ser atendidas (36,6%), seguida de Andalucía (31,8%) y Extremadura (27,2%).
El resto se sitúan por debajo de la media española del 24,5%: Aragón (23,1%), Cantabria (22,6%), Madrid (21,5%), Navarra (19,8%), País Vasco (18,6%), Castilla-La Mancha (18,4%), Baleares (17,7%), Galicia (17,6%), Comunidad Valenciana (15,9%), Asturias (13,8%), Murcia (13,5%) y Ceuta y Melilla (9,1%).
Durante el 2017, el saldo de la lista de espera se redujo en 38.189 personas en el conjunto de España, una cifra insuficiente para acabar con el limbo en el que se encuentran 310.120 personas. «A ese ritmo se necesitarían más de ocho años solo para atender a la actual acumulación de la lista de espera», señalan los directores de servicios sociales.
A estos les resulta «especialmente preocupante» que casi el 40% de las personas desatendidas son dependientes severos y grandes dependientes (120.368), que son los que necesitan prestaciones con mayor urgencia.
«El propio Ministerio reconoce en sus informes que, en 2017, una de cada cuatro de las personas con derecho a prestación que han causado baja –la inmensa mayoría por fallecimiento–, no se encontraban recibiendo su correspondiente prestación», alertan.
Fuente: El Periódico