Vivienda

Abre Antequera 51, un residencial puesto en marcha por 80 jubilados

residencial antequera 51El grupo de cooperativistas ha trasladado a Andalucía el modelo «cohousing» propio de los países del Norte de Europa.

La esperanza de vida ha aumentado considerablemente en España, donde la media ya supera los 83 años. Vivimos más tiempo y además con mejor calidad de vida, una situación que está comenzando a cambiar el modelo actual de residencias para la tercera edad. Cada vez son más los mayores que deciden pasar la última etapa de su vida en un lugar que ofrezca todas las atenciones necesarias, pero con la autonomía de una vivienda independiente.

Ese precisamente era el sueño que perseguían los fundadores de Antequera 51, un residencial puesto en marcha por 80 cooperativistas que acaba de abrir sus puertas en este municipio malagueño, convirtiéndose en uno de los primeros espacios de «cohousing» de Andalucía.

El concepto «cohousing», propio de los países del Norte de Europa, se basa en crear espacios de vivienda colaborativa para personas mayores, donde son los propios residentes los que gestionan los servicios en función de sus necesidades.

En España en los últimos años se han creado algunos residenciales basados en este modelo en Valladolid y en Madrid, en Andalucía existen un par ejemplos en la provincia de Málaga, pero ninguno tiene las características de Antequera51 que ha sido creada siguiendo exhaustivamente los parámetros de este concepto.

El grupo de cooperativistas antequeranos, la mayoría de ellos jubilados, comenzó a gestar la idea en 2013 y tres años después comenzaron las obras de este residencial en el que han invertido más de 5,5 millones de euros.

Apoyo Institucional

Según explica a elEconomista Andalucía Francisco Javier López, supervisor de Antequera 51, el proyecto ha contado con el apoyo de la Junta de Andalucía, que le ha concedido una subvención a través de la Agencia Idea de unos 500.000 euros y del Ayuntamiento del municipio, que ha cedido por 99 años la parcela municipal de 7.000 metros cuadrados en la que se ha levantado el residencial.

Las modernas instalaciones cuentan con 80 viviendas independientes de diferentes tamaños y categorías y además albergan espacios comunes como peluquería, gimnasio, lavandería, cafetería y espacio para personal sanitarios.

«Son viviendas colaborativas, es una filosofía de vida que se basa en vivir con la independencia de una vivienda pero con los servicios que ofrece una residencia. Ellos mismos serán los gestores del edificio y contratarán los servicios que necesiten», comenta el supervisor.

Antequera 51 no es una residencia convencional, por lo que la horquilla de edad de sus usuarios es mucho más amplia que en estos espacios. El nombre indica que la edad mínima para residir en estas viviendas son los 50 años, los cooperativistas actuales rondan entre los 51 y los 75, aunque el residencial está abierto a personas más mayores.»Gestionar estas instalaciones no es tarea fácil, por lo que los más jóvenes guiarán y ayudarán a los más mayores», añade López.

El residencial, que ha sido inaugurado este mes, está a la espera de solucionar los últimos detalles del suministro eléctrico y de agua caliente para poder recibir a los primeros residentes. El complejo no está pensado solo para los cooperativistas que lo han puesto en marcha, está abierto a cualquier persona que desee vivir allí, aunque actualmente las 80 plazas que ofrece están cubiertas.

El principal reto de los fundadores de este proyecto es conseguir implantar este modelo de viviendas colaborativas en España. «Nuestra meta es ser un referente para que este concepto logre sustituir al modelo actual de residencia», señala el supervisor.

Garantizar que los últimos años de nuestra vida estén marcados por la independencia, sin renunciar al bienestar, ese es el sueño de este grupo de andaluces convertidos en emprendedores a la tercera edad.

Fuente: el Economista

Viviendas diseñadas para facilitar la vida de las personas mayores

moderna-cocina-para-minusvalidosLa empresa Senioriales construye un complejo de apartamentos en alquiler con servicios para la tercera edad en Hendaia.

Cada vez es más habitual entre las personas mayores decantarse por la opción de vivir e en sus propias casas, y no en una residencia. Seguir manteniendo un espacio personal, rodeado de recuerdos y objetos personales, y mantener la independencia son algunas de las razones para ello.

Por este motivo, la empresa Senioriales ha decidido construir un complejo de apartamentos con servicios para personas mayores. El pasado 1 de febrero se realizó la presentación oficial mostrando sus nuevas instalaciones en el centro de Hendaia, la ciudad seleccionada por su oferta tanto económica como de ocio y turismo.

El complejo ya está abierto desde este lunes, 4 de febrero, y el acto de presentación contó con la presencia de Frederic Brouard, director de Marketing y Comunicación;Jerôme Gauvin, responsable regional de Explotación;y Aïcha Gerbaud Navarro, directora de Senioriales Hendaya.

RECEPCIÓN Y PARKING

Senioriales Hendaya cuenta con 90 viviendas amuebladas en alquiler (de 27 a 72 metros cuadrados) en un nuevo edificio adaptado y segurizado con recepción siete días a la semana, 25 plazas de parking, habitación de recepción para invitados, salón club, terraza equipada, restauración, servicio de limpieza de habitaciones, animaciones diarias, etc.

Son viviendas funcionales y diseñadas para hacer la vida cotidiana más fácil. Cumplen con las expectativas de las personas mayores autónomas que desean combinar confort, seguridad y convivencia.

Fuente: noticias de Gipuzkoa

Presentada la publicación ‘Viviendas para personas mayores en Europa. Nuevas tendencias para el Siglo XXI’

Jornada viviendasEl martes, 11 de diciembre de 2018, ha tenido lugar la Jornada organizada por la Fundación Pilares para la Autonomía Personal y la Fundación Caser “Viviendas para personas mayores en Europa. Nuevas tendencias para el siglo XXI” en la que se ha presentado un libro con el mismo título, editado por la Fundación Pilares. En el acto de inauguración, además de Pilar Rodríguez, presidenta de F. Pilares, y Juan Sitges, Director de F. Caser, han intervenido la Secretaria de Estado de Servicios Sociales, Ana Isabel Lima, y Cristina Narbona, que fue responsable de Vivienda y es experta en la materia.

En los países más avanzados en políticas sociales llevan años realizando una transición, desde el modelo institucional clásico de residencia, que se considera agotado, hacia el modelo hogar. En este contexto, se construyen y ofrecen diferentes tipos de viviendas para esta fase de la vida (viviendas compartidas, viviendas comunitarias, viviendas colaborativas -cohousing-, apartamentos con servicios, etc.), en las que las personas pueden continuar viviendo, aunque se necesiten cuidados y atención profesional.

Con ello se trata de acercarse al cumplimiento del deseo de la mayoría de las personas, que quieren mantenerse el mayor tiempo posible (toda la vida) en sus hogares. Para conseguirlo es importante invertir en realizar viviendas más accesibles y adecuadas, hacer mejoras en los hogares para evitar que las personas se tengan que mudar cuando se hagan mayores, y garantizar la provisión de cuidados y apoyos en casa cuando se tienen situaciones de dependencia.

Para explicar las tendencias existentes en diferentes países, como ponentes de la Jornada han participado reconocidos expertos en el sector de vivienda y atención a personas mayores, que son también autores del libro:

– Inglaterra (Jeremy Porteus)
– Alemania (Miguel Montero)
– Suecia (Astrid Lindström)

También aportó su experiencia como conocedor in situ de experiencias internacionales, Josep de Marti, director de Inforesidencias.com, que describió algunos ejemplos de viviendas existentes en EE.UU y Holanda.

Como modelo de vivienda alternativa a las residencias en el medio rural español, se presentó la experiencia de las viviendas comunitarias de Castilla La Mancha, que se ofrecen por el Gobierno de esa C.A. como alternativa viable para combatir la soledad y vulnerabilidad de muchas personas mayores que quedan aisladas en sus pueblos, favorecer el apoyo mutuo y desarrollar la solidaridad vecinal. Además de cumplir estos loables objetivos, esta modalidad de vivienda también presenta una nada desdeñable potencialidad de creación de empleo al ofrecer puestos de trabajo a la población joven en unos territorios muy marcados por la despoblación.

Un tipo de vivienda que está teniendo mucha aceptación entre las personas mayores en España, es el denominado cohousing. Sin embargo, existen dudas en cuanto a su diseño, sobre todo, pensando en que este tipo de viviendas continúen resultando válidas cuando las personas desarrollen situaciones de dependencia. Para debatir los aspectos que deben considerarse, hubo en la Jornada una intervención del arquitecto, Javier del Monte, experto en la materia.

Pero, además de planificar un nuevo modelo de viviendas para personas mayores, se considera muy relevante plantear la necesidad de desarrollar una política de adaptación del parque de viviendas existente. Más de un 95 % de la población mayor española vive en su propia casa, y la mayoría son propietarias de la misma. Pero alrededor de un 40 por ciento de estas viviendas tienen problemas de accesibilidad importantes al carecer de ascensor, salvaescaleras o rampas, de manera que, en algunos casos, el hogar puede llegar a convertirse en una cárcel. También existen muchas barreras en el interior de la casa, que obstaculizan llevar a cabo las actividades de la vida diaria cuando se tienen limitaciones funcionales Tanto en la Jornada, como en el libro, el arquitecto Xavier García Milà describe cómo llevar a cabo programas coherentes y estruc­turadas de adaptación funcional personalizada de viviendas.

Y no podía faltar en una Jornada y Publicación que trata de orientar sobre diferentes facetas que tienen que ver con la vivienda de las personas mayores y su bienestar, el tema de las Tecnologías de la información y la comunicación (TIC), que tienen ya en la actua­lidad, pero lo tendrán mucho más en el futuro, un relevante papel. Se aportó a la Jornada y a la publicación una aportación de Fundación Vodafone España en la que se describe parte de la amplia oferta ya disponible que puede resultar de utilidad para personas mayores (interfaces accesibles, asistentes de voz, mensajería instantánea), así como diversos desarrollos tecnológicos relacionado con la domótica y la teleasis­tencia avanzada (detectores de presencia, de humo, gas, apertura de puertas, videoatención, control de constantes vitales…). Y se da cuenta también de un futuro nada lejano en el que la robótica tendrá cada vez más presencia, entre otras cosas, para mejorar el cuidado de las personas que tienen una situación de dependencia.

La presidenta de la Fundación Pilares, Pilar Rodríguez, señaló la existencia de evidencia científica acerca de que el modelo vivienda produce mucho más bienestar a las personas que el modelo institución. Y tiene también más capacidad para ofrecer una atención centrada en la persona en un entorno que sintoniza y da sentido al mundo de valores inherentes a cada persona para que pueda seguir controlando su vida. Al plantear un análisis crítico sobre el modelo residencial, también animó a la ciudadanía, no solo a las personas mayores, a plantearse preguntas como: “¿Dónde querremos vivir si tenemos que dejar nuestra casa de siempre?, ¿cómo poder mantener nuestro estilo de vida, nuestra propia imagen y llevar a cabo nuestros deseos más íntimos?, ¿cómo querremos que nos cuiden?, ¿cuánto tendremos o podremos pagar por ello? Creo que la respuesta pasa por avanzar en la integración de las políticas de vivienda y las de cuidados de larga duración, como se hace en otros países. Solo así conseguiremos que el lugar en el que vivir y recibir cuidados no signifique un desarraigo traumático de lo más íntimo y propio, sino que más bien se plantee como una mudanza:  La locución más adecuada a la que aspiramos sería poder decir “Me cambio de casa”, en lugar de decir: abandono mi casa y voy a “ingresar” en una residencia”.

Argumentos desarrollados en la Jornada, y que pueden encontrarse en el libro:

Las personas mayores, como el conjunto de la población, no tienen buena imagen de las residencias. La razón fundamental para este rechazo es la percepción social de que el abandono del hogar y el ingreso en una institución provoca una pérdida de control sobre la propia vida: lo habitual es que se comparta la habitación con alguien desconocido, que el ambiente físico se parezca más a un hospital que a una casa, que no se puedan hacer elecciones (horas de levantarse y acostarse, comidas…), que dejen de realizarse las actividades que a las personas les gustan… Que sean otros, en fin, quienes deciden sobre el devenir de la vida cotidiana, lo que puede conducir a la pérdida de valor y de sentido de la propia vida.

Sin embargo, el fenómeno de la creciente longevidad que estamos viviendo arroja un escenario que nos sitúa como el país más envejecido del mundo. Según las últimas proyecciones demográficas del INE para España, dentro de tan solo quince años la población mayor de 65 años pasará de representar un 19 % a más del 25 % del total. Y durante ese corto periodo de tiempo el número de personas mayores de 80 años se incrementará en un millón de personas. Es en este segmento de edad cuando es más probable desarrollar una situación de dependencia por la que se precisen cuidados y apoyos de larga duración o vivir en solitario. Y es entonces cuando suele recurrirse a las residencias, en ausencia de una oferta de viviendas adecuadas para estas situaciones.

Sin duda, la escisión que desde siempre ha existido en nuestro país entre las políticas de vivienda y las de servicios sociales y de sanidad están entre las causas de esta debilidad en la oferta pública de viviendas para personas mayores. Que estas casas se diseñen integradas en entornos comunitarios (y no en el extrarradio de las ciudades) y que los apoyos y cuidados se presten con el enfoque de atención centrada en la persona es la tendencia clara que se aprecia en los países más avanzados.

Conocemos por la investigación desarrollada que las perso­nas mayores de hoy, y aún más las que están llegando a la edad de jubilación, presentan un perfil muy diferente al de generaciones anteriores: mucho más alto nivel de estudios, pensiones más elevadas, modelos de ocio más sofisticados, mayor conciencia de sus derechos y, por tanto, con un grado de asertividad y exigencia superiores. Este cambio de perfil agudiza la negativa percepción que las personas mayores tienen en cuanto a los modelos de alo­jamientos existentes (las residencias). Y reclaman cada vez con más fuerza contar con viviendas modelo hogar en el que puedan mantener el máximo control de sus vidas, aunque lleguen a desarrollar situacio­nes de dependencia.

La lon­gevidad creciente de la población y las demandas de las personas mayores se presenta como un gran reto para la arquitectura, pero también para promotores, planificadores y gestores de vivienda y de las políticas de servicios sociales y sanitarios, mediante miradas y políticas transversales.

Jornada sobre viviendas para personas mayores en Europa

viviendasFUNDACIÓN PILARES PARA LA AUTONOMÍA PERSONAL Y FUNDACIÓN CASER organizan una jornada sobre viviendas para personas mayores en Europa, durante la misma jornada, también se hará la presentación de un nuevo libro con el mismo título.

Además de la Presidenta y Director de las Fundaciones convocantes, en la inauguración participarán: ANA I. LIMA, Secretaria de Estado de Servicios Sociales, y CRISTINA NARBONA, experta en materia de vivienda y ExMinistra.

En muchos países se está abandonado el modelo clásico de residencias y se ofrecen viviendas en las que las personas pueden seguir controlando su estilo de vida, garantizándose también que reciben en ellas cuidados profesionales.

Expertos en las políticas de vivienda de Suecia, Alemania, Gran Bretaña y EE.UU. presentarán la evolución que se experimenta en estos países. También participan profesionales de la arquitectura y de los servicios de atención españoles.

FECHA:  11-DICIEMBRE, 09:00 HORAS
LUGAR: SALÓN DE ACTOS DEL INSTITUTO DE MAYORES Y SERVICIOS SOCIALES (IMSERSO), (Av. Ilustración s/nº, esq. Ginzo de Limia, 58. Madrid)

Más información:
http://www.fundacionpilares.org/noticias/181211-jornada-viviendas-personas-mayores-europa-nuevas-tendencias-siglo-xxi.php

 

 

Cáritas Diocesana inaugura este viernes los nuevos apartamentos para personas mayores en Málaga

Caritas MalagaEl obispo de Málaga, Jesús Catalá, inauguró el viernes a las 17.30 horas los nuevos apartamentos para personas mayores que llevan el nombre del que fuera obispo Ramón Buxarrais. Posteriormente visitó los Tomás de Cózar, donde los asistentes pudieron disfrutar de una exposición fotográfica, realizada con motivo de su XXV aniversario. A las 19 horas, Catalá presidió una Eucaristía de acción de gracias en la parroquia de Santiago.

El edificio Ramón Buxarrais cuenta con ocho apartamentos de un dormitorio en los que van a residir nueve personas, ya que uno de ellos será ocupado por un matrimonio. Este bloque de tres plantas consta de un patio interior y se encuentra situado en la Plaza Alfonso XII, junto al Santuario de la Victoria.

Las plazas ya se encuentran adjudicadas, incluso hay una larga lista de espera. Estas personas, también mayores de 65 años y con rentas no contributivas, han sido elegidas por su especial vulnerabilidad, y proceden, en algunos casos, de centros para personas sin hogar.

Fue donado a la institución por un particular con el deseo de que se destinase al cuidado de personas mayores. Sin embargo, ante la crisis humanitaria de los refugiados, hace dos años Cáritas decidió temporalmente dedicar el inmueble a este fin, cediendo su uso a CEAR hasta que encontrasen un lugar que reuniese las condiciones necesarias.

Antes de su ocupación, el edificio, que fue construido en el siglo XIX, necesitó importantes obras de rehabilitación de las que se hizo cargo el Instituto Municipal de la Vivienda y en los últimos meses se han realizado pequeñas modificaciones para adaptarlos a su nuevo uso, según han precisado desde Cáritas Diocesana en un comunicado.

XXV ANIVERSARIO DE ‘TOMÁS DE CÓZAR’

Igualmente, este viernes se celebrará el XXV aniversario de los apartamentos ‘Tomás de Cózar’, construidos siendo obispo Ramón Buxarrais para dar respuesta a los damnificados por las inundaciones de 1989, que causaron estragos en las viviendas más vulnerables del centro de Málaga.

Desde Cáritas han recordado que «de la noche a la mañana, antiguos corralones, ocupados en buena parte de los casos por personas de avanzada edad, fueron destrozados por las fuertes lluvias ante la impotente mirada de quienes no solo perdían su hogar, sino también las pertenencias y recuerdos de toda una vida».

Así se ordenó construir estas viviendas en un solar cedido entonces por el Ayuntamiento, comenzando la historia de los apartamentos ‘Tomás de Cózar’, situados en la calle de la que tomaron su nombre. Durante estos 25 años, 35 personas han vivido en esta comunidad de vecinos, donde el ambiente de familia, el apoyo mutuo o el rato de charla son la dinámica habitual.

Cinco voluntarios, una trabajadora y el director del centro, Alfonso Clavero, se encargan de ayudarles de muchas formas distintas. Echar una mano con las compras más pesadas, solucionar trámites administrativos, reparar pequeños electrodomésticos o, simplemente, ofrecer un poco de conversación, son algunas de las tareas que desempeñan los miembros de este equipo.

Las 12 viviendas se distribuyeron en tres plantas y cada apartamento consta de salón, cocina, dormitorio y cuarto de baño. El ascensor es otro de los elementos esenciales, dado a quien se dirigen. Para acceder a este recurso, además de la edad, son necesarios una serie de requisitos: carecer de recursos suficientes para acceder a una vivienda digna, poder desarrollar de manera autónoma las tareas cotidianas, no contar con alternativas de acogida familiar ni tener familiares a su cargo y no disponer de otras opciones por parte de las administraciones públicas.

Fuente: 20 minutos

Dos ancianos duermen dos noches en un parque tras ser desahuciados en Oviedo

PARQUE_OVIEDOEl pasado 18 de septiembre un juzgado ejecutó el desahucio de la pareja.

La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Oviedo ha denunciado el incumplimiento por parte del Juzgado del convenio para la prevención de desahucios, que le obliga a comunicar a los servicios sociales municipales las situaciones de especial vulnerabilidad o exclusión social, después de tener conocimiento de que un matrimonio de 74 y 72 años han tenido que dormir en el parque San Francisco durante dos noches tras ser desahuciados.

En una nota de prensa la PAH ha explicado que el pasado 18 de septiembre un juzgado de Oviedo ejecutó el desahucio del matrimonio, cuyos ingresos, provenientes de una pensión no contributiva, no les permitían costear el alquiler de la vivienda en la que residían.

“Completamente desamparados”

Al carecer de un alojamiento alternativo, «completamente desamparados y conmocionados por la situación a la que se veían abocados», pasaron dos días y dos noches en un banco del Parque San Francisco, hasta que integrantes de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Oviedo tuvieron conocimiento de su estado y, con su apoyo, accedieron a un alojamiento «provisional y precario» mientras se gestiona ante los servicios sociales municipales una solución definitiva.

El Consejo General del Poder Judicial, el Gobierno del Principado de Asturias y la Federación Asturiana de Concejos firmaron el 15 de marzo de este año un convenio que establece un protocolo de actuación para la prevención de situaciones de exclusión residencial extrema como la que sufre este matrimonio septuagenario ovetense.

Riesgo de exclusión

En virtud de ese protocolo, los juzgados que reciben demandas por impago de alquiler están obligados a evaluar si la familia demandada se encuentra en situación de riesgo de exclusión social y, en caso afirmativo, facilitarle información acerca de los recursos de asistencia social disponibles, además de trasladar el caso a los servicios sociales municipales para que adopten las medidas oportunas para garantizar sus derechos sociales.

El convenio expresamente considera a las personas mayores de 65 años objeto de atención especial. Por ello, la PAH de Oviedo ha denunciado que «el juzgado ha ignorado todos estos compromisos» y que su actuación «negligente e inhumana» resulta «incompatible con el respeto a su derecho fundamental a disponer de una vivienda adecuada reconocido en diversos convenios internacionales».

Ante esta situación la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Oviedo solicitará una reunión al Decano de los Juzgados de Oviedo para trasladarle esta situación.

No lo sabían

Por su parte, el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) ha asegurado que el Juzgado de Primera Instancia nº 3 de Oviedo desconocía la situación de vulnerabilidad de los dos ancianos desahuciados en Oviedo.

En una nota de prensa, han explicado que el día 18 de septiembre el Juzgado de Primera Instancia nº 3 de Oviedo realizó dos lanzamientos. Uno de un local de negocio y el otro de una vivienda que, al menos en el momento de llevarse a cabo el lanzamiento, no estaba ocupada por persona alguna.

”Si los ocupantes de la vivienda eran las personas y con esas condiciones, no habían puesto en conocimiento del Juzgado su situación y la misma, por tanto, no ha podido ser conocida ni valorada por el servicio correspondiente”, prosiguen.

No se podía apreciar

Así, han explicado que cuando se detecta en la diligencia algún supuesto de vulnerabilidad “tienen orden de suspensión para dar cuenta al Juzgado correspondiente y el día 18 no ocurrió”, porque se reitera que “no se tenía conocimiento de esa situación”.

”El día 18 de septiembre de 2018 no se ejecutó ningún desahucio en el que se pudiera apreciar o valorar previamente situación de especial vulnerabilidad alguna, porque no fue conocedor de ninguna situación de riesgo”, han insistido.

 

 

Fuente: La Vanguardia

 

 

 

Más viviendas asistenciales para las personas mayores

vivienda socialEl parque de pisos público de Barcelona destinados a gente mayor crece con la nueva promoción de vivienda pública de Quatre Camins, en el barrio de Sant Gervasi – la Bonanova, que dispone de 44 alojamientos destinadas a personas mayores de 65 años con dificultades para acceder a un hogar o que tienen necesidades de accesibilidad, pero que pueden mantener una vida autónoma y activa.

Cada uno de los alojamientos tiene una superficie de unos 40 metros cuadrados, pueden vivir hasta dos personas y dispone de un dormitorio, un comedor – sala de estar, una cocina y un baño adaptado. Además, se ha instalado un sistema de teleasistencia en el baño y en el dormitorio para poder activar los servicios de emergencia en caso de producirse un incidente.

El edificio consta de una superficie total de 1.891 metros cuadrados y está equipado con diferentes espacios comunitarios como terrazas abiertas y salas de recreo, además de una zona de lavandería y autoservicio. Además, dispone de una serie de servicios para mejorar el confort de los vecinos y las vecinas: limpieza de los espacios comunitarios y de los pisos, conserjería y mantenimiento y reparaciones menores.

Un servicio de atención social e individual hará el seguimiento del bienestar del vecindario y facilitará el conocimiento de los recursos del barrio (centros, bibliotecas y otros equipamientos al alcance). Por otra parte, se fomentará la participación comunitaria y las relaciones de buena vecindad mediante sesiones y actividades en grupo.

Para acceder a este tipo de vivienda pública se piden los siguientes requisitos: tener más de 65 años, garantizar que la persona puede llevar una vida autónoma (el grado de autonomía se determina según lo establecido en la solicitud de programas y servicios sociales de atención a las personas mayores), inscribirse en el Registro de Solicitantes de Vivienda Protegida, haber residido en Barcelona los últimos dos años, tener un nivel de renta de 24.850,48 euros (1 persona) y 25.619,05 euros (dos personas) y no disponer de vivienda o tener problemas de accesibilidad o habitabilidad.

Fuente: El Periódico

València Conviu facilita una vivienda a jóvenes y compañía a las personas mayores

Concejala de Personas Mayores, Sandra GómezLa Concejalía de Personas Mayores, en su apuesta por la solidaridad entre las distintas generaciones, pone en marcha, como cada año, el programa intergeneracional y solidario «València-Conviu», destinado a que jóvenes y personas mayores vivan juntos.

Según la Concejala de Personas Mayores, Sandra Gómez, este programa, que regresará con el próximo curso universitario 2018-2019, «promueve que estudiantes de la Universitat de València, la Universitat Politècnica y la Universidad Católica, y las personas mayores de la ciudad vivan juntos».

A través de esta colaboración, «las personas mayores de 60 años de nuestra ciudad, que vivan solas, podrán compartir su vivienda con un joven universitario». Asimismo, «los jóvenes deberán ser menores de 35 años y no ser residentes en València», añadía Gómez. En ese sentido, destaca que es una iniciativa destinada a «todas aquellas personas que no se puedan permitir el gasto de un alojamiento mientras estudian».

«València-Conviu» tiene como objetivo «fomentar la convivencia y el acercamiento intergeneracional por medio de la solidaridad mutua», así como «resolver los problemas de soledad que sufren las personas mayores», indica la concejala. Además, «proporciona una alternativa de alojamiento a los y las jóvenes estudiantes».

Las personas mayores que estén interesadas en formar parte de este proyecto pueden presentar la solicitud en la Oficina Municipal de Atención a los Mayores del Servicio de Personas Mayores del Ayuntamiento de Valencia, en la calle Amadeo de Saboya número 11. Y los jóvenes podrán hacerlo en sus respectivas universidades.

Fuente: Levante EL MERCANTIL VALENCIANO

El cohousing llega a la provincia de Alicante

CohousingcharlaenAlicanteCuatro grupos de personas se unen en Alicante para buscar terrenos en los que construir viviendas colaborativas y autogestionadas para vivir en comunidad.

El objetivo es envejecer entre amigos y buscar alternativas a los geriátricos.

Quieren vivir su vejez de otra manera, lejos de la soledad del hogar o al margen de un geriátrico. Y aunque en países como Dinamarca está a la orden del día, el cohousing acaba de aterrizar en Alicante. Un fenómeno por el que grupos de personas con intereses y formas de pensar similares se unen para vivir en comunidad y de manera colaborativa.

En la provincia de Alicante ya son cuatro los grupos que se están formando, en estos momentos con reuniones para conocerse y establecer el marco de convivencia antes de comenzar a buscar terrenos. Uno de estos grupos está formado por personas de todas las edades, otro sólo por mayores. Otro de los grupos es además ecológico y el cuarto está enfocado a vivir de alquiler. La iniciativa ha llegado de la mano de la asociación Seniors Vida Sostenible y de su responsable Prudencio López, un profundo conocedor del sector tras haber trabajado media vida en márketing inmobiliario. «La idea es que las comunidades se levanten en suelo urbano y que alberguen entre 20 y 30 viviendas en forma de herradura adosadas y de una planta. En el centro irían los servicios comunes, donde puede haber comedor, lavandería y espacios de ocio o para trabajar», explica López.

Un modelo que se aleja de las residencias geriátricas que conocemos hoy en día «y de los problemas que en muchas ocasiones se generan en las comunidades de vecinos debido a que la gente que convive no se conoce previamente». López propone que el coste aproximado de las viviendas, en función de donde se prefiera elegir el suelo, «estará en unos 100.000 euros, ya que cuesta sólo lo que cuesta hacerse». Aunque las viviendas pueden ser en régimen de alquiler, cooperativa o compra, el modelo aconsejado por la asociación es el de cesión de uso, «por el que la propiedad de la casa es de la cooperativa y las personas tienen garantizado el usufructo para ellos y sus hijos». La asociación se encarga de todos los trámites del proyecto. «Es más económico porque no existen intermediarios y la banca ética financia entre el 60% y el 70% del proyecto». Además, se produce otro tipo de ahorro, por ejemplo en las compras. «No es lo mismo comprar una estufa que 25 para todas las casas y esa regla se aplica para todo tipo de productos del día a día». El ahorro en la cesta de la compra puede llegar a ser del 10%, calcula López.

El proyecto ya ha conquistado a personas como M. J. C., maestra jubilada, que pertenece al grupo intergeneracional y para quien la calidad de vida es el elemento más importante del cohousing.

«Te haces mayor y ves que las alternativas que hay hoy en día son quedarte solo en tu casa o irte a una residencia. Tampoco pretendemos que los hijos nos cuiden. Lo que de verdad te apetece es compartir tu vida con personas afines, volver al concepto de clan, de aldea».

También están interesados en dar el salto a esta forma de vida Víctor Martínez y su mujer. Rozando los 60 años, este matrimonio desea sobre todo «cambiar el actual modelo, caduco y obsoleto de, a determinada edad, tener que ir a casa de tus hijos o a una residencia». Martínez confía en que de aquí a unos tres años él y su mujer puedan estar viviendo en comunidad.

Los proyectos que promueve la asociación Seniors Vida Sostenible están fundamentados además en la llamada arquitectura saludable, «basada en permitir que el organismo esté en plenitud, algo muy importante para las personas mayores, a quienes por su edad no se les puede restar energía», explica Rafael Hernández, del estudio DINA5, equipo técnico y de diseño de Seniors Vida Sostenible.

En este sentido, las casas se construirán teniendo en cuenta el grado de radiación que les rodea, si hay antenas de telefonía o tendidos eléctricos. También, se observará, «si hay emanaciones de gas radón en el subsuelo». La construcción se hará, señala Hernández, «minimizando el uso de hierro» y se evitarán ciertos acabados, como las pinturas plásticas, que son insalubres porque generan mucha humedad». Así, añade el arquitecto, «emplearemos revestimientos más naturales, como las arcillas y los suelos serán naturales, como parquets, piedra o cerámica».

Estos pioneros del cohousing en Alicante, cuya edad ronda los 60 años, nacieron en los años 50 del pasado siglo, pasada la posguerra y en los albores de los años 60. Su juventud, por tanto, transcurrió entre minifaldas y oyendo a los Beatles. «La generación de personas que está empezando a jubilarse ahora nada tiene que ver con la anterior, nacida en la Guerra Civil y a los que asociamos con Machín o Antonio Molina. Es una generación con unos gustos y necesidades muy diferentes a la anterior, que en muchos casos ya han tenido a familiares en residencias y rechazan ese modelo, pero tampoco quieren ser una carga para sus hijos», explica Manuel Nevado, vocal de Ciencias Sociales y del Comportamiento de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología. En este sentido, Nevado cree que fórmulas como la del cohousing han venido para quedarse. «En España hay 6 ó 7 comunidades de este tipo, mientras que en Dinamarca funcionan 150. Aún estamos a años luz, entre otras cosas porque aún sigue pesando mucho ese paternalismo y sentimiento de culpa cuando nuestros padres se hacen mayores». Respecto a las residencias geriátricas, Nevado cree que también es hora de darles la vuelta. «La nueva generación de mayores, es deportista, ha viajado mucho y ya ha tenido contacto con internet y otras tecnologías. Eso debe tener un reflejo en las residencias, que por ejemplo podrían incorporar instalaciones deportivas».

Pero además de las fórmulas residenciales, para muchos expertos es hora de darle la vuelta a los recursos, servicios y prestaciones que se ofrecen desde las administraciones. El gerontólogo y experto en gestión sanitaria, José Antonio Rabadán, pone como ejemplo la ciudad de Alicante, «donde tenemos una concejalía de juventud, como en casi todos los ayuntamientos, cuando la población mayor de 65 años dobla a la comprendida entre los 15 y 25 años. No tiene mucho sentido este reparto de recursos».

Por otra parte, añade, los recursos tradicionales que han servido para atender a la población adulta en su necesidad de ocio y sentimiento de utilidad «están dejando de ser atractivos para los nuevos perfiles que se jubilan y se preguntan cómo ocupar su tiempo libre». Rabadán pone más ejemplos, «mientras que la universidad para adultos sigue ganando alumnos año tras año, otros programas quedan desfasados pero siguen manteniéndose en cartera por pura inercia». El colectivo de personas mayores, añade Rabadán, «ha dejado de ser un colectivo al que se pueda satisfacer con una oferta única y estereotipada: viajes del Imserso, talleres de manualidades o gimnasia dirigida».

Fuente: Diario Información

Fuengirola aprueba el reglamento de viviendas compartidas para mayores

Vivienda_compartida__8Fuengirola aprobó esta semana el reglamento que regirá el proceso para que mayores con escasos recursos compartan viviendas de titularidad municipal. En concreto, este plan tiene como finalidad poner a disposición de personas mayores viviendas de titularidad municipal para compartirlas con otros. El edil de Servicios Sociales, Francisco José Martín, presentó dicho reglamento, que fue aprobado por unanimidad y que permitirá controlar el proceso y los parámetros de acceso a estas viviendas, así como algunas normas de convivencia. De hecho, el edil adelantó que el Ayuntamiento dispone ya de una vivienda completamente habilitada para este fin.

Según explicó Francisco José Martín en su comparecencia plenaria, se trata de un programa «innovador, porque no existe nada similar en los municipios del entorno», y que tiene su origen en una serie de citas que la alcaldesa, Ana Mula, y el propio edil mantuvieron con personas mayores que tenían pensiones no contributivas y unos ingresos mínimos.

Así, la fórmula de viviendas compartidas se presenta, ante la necesidad de un alojamiento alternativo para estas personas, en una tendencia a adaptar el recurso a la necesidad y no al contrario. En especial, los alojamientos compartidos están concebidos para aquellas personas mayores de 65 años que lo precisen y cuyo perfil y características se reflejan en el reglamento.

Por norma general se dirigirán a personas que se encuentren en un estado físico y psíquico que no necesiten de apoyo externo, tengan dificultades para mantenerse en su vivienda por deterioro de la misma o problemas de convivencia, o que sean obligados a abandonarla o no dispongan de recursos económicos, familiares o sociales, entre otros.

Cada usuario contará con una habitación individual o en el caso de las parejas, podrán compartirla. Eso sí, tanto el salón, como los baños o la cocina serán considerados como zonas comunes, por lo que los «compañeros» deberán compartir esos espacios. Además el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) se encargará de las labores generales de limpieza de las viviendas.

El reglamento de cuotas tuvo que ser modificado tras una advertencia de Izquierda Unida, que apreció que las cuotas que tendrían que pagar los jubilados en función de sus pensiones no eran progresivas.

Fuente: diario sur

El Ayuntamiento de Málaga entrega 38 viviendas protegidas destinadas a personas mayores

vivendas mayoresEl alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, acompañado por los concejales de Ordenación del Territorio y Vivienda y de Deportes, Francisco Pomares y Elisa Pérez de Siles, respectivamente, ha entregado a 38 familias de mayores las llaves de sus nuevos hogares en calle Carril.

Esta promoción de viviendas protegidas, que se encuentra en el barrio de la Trinidad, está especialmente pensada y diseñada para mayores de 65 años que residirán en este novedoso complejo en régimen de alquiler. Así, el nuevo edificio, promovido por el Instituto Municipal de la Vivienda (IMV), se encuentra frente a la plaza Pepito Vargas, recientemente inaugurada, y está ideado para satisfacer las demandas sociales de este colectivo. Impulsado desde el área de Ordenación del Territorio y Vivienda y en coordinación con el distrito Centro y el área de Derechos Sociales, ha consistido en la construcción de un nuevo edificio, con aparcamientos y un espacio para uso ciudadano en calle Carril. Este proyecto ha sido redactado y dirigido en su totalidad por arquitectos y técnicos municipales.

De la Torre ha apuntado que supone una inversión total con fondos municipales de más de 2,2 millones de euros ante la ausencia de fondos de la Junta para promover viviendas protegidas. El nombre del complejo está dedicado a Bernardo Rosa González, ya fallecido, y que fue presidente del Hogar del Jubilado «Ilusión» del Puerto de la Torre y miembro de la Comisión Permanente del Mayor.

CARACTERÍSTICAS DE LA PROMOCIÓN

El edificio se desarrolla en una superficie útil de 1.406,76 metros cuadrados, lo que supone una media de 37,02 metros cuadrados por vivienda. Las zonas comunes y de servicio ocupan 375,34 metros cuadrados que se desglosan en un salón de sus múltiples de 164,35 metros cuadrados; zonas de despacho de 32,7 metros cuadrados, para dirección-administración, archivo y asistencia personalizada; un gimnasio-sala de baile de 66,59 metros cuadrados; los aseos de 7,47 metros cuadrados; y los espacios comunitarios de 104 metros cuadrados, para distintos usos como talleres, salón-informática, invernadero o lavandería.

Con esta actuación, el Consistorio de Málaga realiza un nuevo esfuerzo para ofrecer al colectivo de mayores una vivienda adecuada a sus necesidades, con total accesibilidad, zonas comunes y de esparcimiento, así como eficientes y con un coste de mantenimiento reducido.

En régimen de alquiler asequible, los 38 alojamientos para mayores están integrados en un nuevo edificio adaptado para garantizar la plena accesibilidad en todas sus estancias y accesos, con el fin de adecuar su uso por parte de personas con movilidad reducida.

También incluye la construcción de las viviendas con una serie de mejoras que repercuten en la eficiencia y ahorro energético. Entre éstas, destacan una iluminación eficiente, con la utilización del sistema LED, el aislamiento térmico con la sustitución de la carpintería de aluminio por PVC y el uso de doble acristalamiento en todas las estancias. Estos elementos repercutirán de forma positiva en un menor consumo y un menor mantenimiento de los distintos elementos, que contribuirá a mejorar el bienestar de los usuarios de estas viviendas.

Cuenta además con una tarima flotante que sirve como aislante térmico así como pavimento PVC antideslizante en los suelos de los baños. Todo ello junto a un sistema domotizado con alarma acústica y visual en caso de emergencia y con alarma y corte de suministro en caso de avería con fuga de agua.

Cada alojamiento constará de una estancia salón-comedor con cocina integrada y amueblada, un baño y un dormitorio. Como se ha indicado, se integran en el edificio zonas dedicadas a uso común, que servirán de apoyo a los usuarios y al propio barrio como es el Centro Municipal de Envejecimiento Saludable.

PERFIL DE LOS ADJUDICATARIOS

El perfil de los adjudicatarios de la nueva promoción es parejas y personas solas mayores de 65 años. El proceso de selección ha sido a través del Registro Municipal de Demandantes por sorteo un total de 30 adjudicatarios; mientras que ocho se han seleccionados por el comité formado por las Áreas de Derechos Sociales, Accesibilidad y Vivienda, entre los casos mas urgentes.

La cuota de alquiler que abonarán los adjudicatarios no supera los 45 euros al mes, cantidad a la que hay que añadirle otros 45 euros mensuales por los gastos de los elementos y servicios comunes.

PROYECTO

El proyecto básico, que fue redactado por un equipo conformado por arquitectos de la Gerencia Municipal de Urbanismo, Juan Antonio Marín Malavé, y del Instituto Municipal de la Vivienda, Gabriel García Jurado, parte de la ordenación prevista en el Estudio Detalle correspondiente a la UE-26 del PERI Trinidad Perchel, que proponía la apertura de una plaza obtenida por retranqueo de la alineación de la manzana en su fachada a calle Carril.

Plantea, de igual modo, el desarrollo de la edificación en torno a un patio comunitario interior, siguiendo las pautas de la tipología de corralón, tradicional en el barrio de la Trinidad.

Además, en el edificio se ubicará el Centro de Envejecimiento Saludable, entre cuyas actuaciones se encuentra la mejora del Proyecto de Memoria que el Ayuntamiento inició en el año 1995. En él se realizan talleres de estimulación cognitiva y se presta servicio a los más mayores con un equipo formado por médicos, psicólogos y enfermeros entre otros. Hasta el momento de su puesta en funcionamiento, este centro se encontraba en calle Donoso Cortés.

Por todo ello, la tipología responde perfectamente a las necesidades del colectivo de personas mayores para el que van destinados los alojamientos, propiciando un lugar de encuentro que posibilite y fomente actividades cotidianas conjuntas entre sus residentes.

Así, como apoyo a los alojamientos, se distribuyen una serie de locales de usos colectivo y de servicios compartidos. Los alojamientos se modulan de forma que la distribución y superficie es prácticamente similar en todos ellos.

ACCIONES MUNICIPALES

Por otro lado, han recordado que esta actuación se enmarca «en la apuesta decidida» del Ayuntamiento por atender y dar respuesta a las necesidades de los mayores de Málaga en materia de vivienda.

En relación con las promociones exclusivas destinadas a mayores, en la actualidad se dispone del emblemático corralón de Santa Sofía, con 56 alojamientos. A esta modalidad se une la entrega esta mañana del edificio con 38 alojamientos de calle Carril y en los próximos meses se procederá también a la entrega de 8 viviendas para mayores en un edificio rehabilitado de calle Calvo. Por otro lado, desde el 2000 se han adjudicado, dentro del parque público de vivienda, más de un centenar de pisos protegidos a mayores de 65 años.

Esta acciones forman parte «del importante esfuerzo» que está realizando el Consistorio para seguir ampliando el parque de viviendas protegidas en la ciudad de Málaga.

Han recordado que desde el año 2000, el IMV ha entregado 5.199 viviendas protegidas a los vecinos de Málaga, teniendo actualmente en diferentes fases de promoción y construcción diferentes promociones que suman otros 116 pisos.

NUEVA UBICACIÓN DEL CENTRO DE ENVEJECIMIENTO

Por otro lado, el Centro de Envejecimiento Saludable se ha trasladado de su sede en calle Donoso Cortos a esta nueva ubicación, incluida en el proyecto «38 viviendas para mayores». Ello permitirá dotar de un plus de calidad y valor para los mayores, ofreciéndoles servicios para la promoción del envejecimiento activo.

La nueva ubicación amplia el espacio disponible hasta la fecha para las actividades desarrolladas en el Centro de Envejecimiento Saludable, así como posibilita desarrollar la sinergia de la actividad física y la estimulación cognitiva en la mejora de la salud cognitiva.

Fuente: 20 minutos

Santa Coloma convierte una vieja escuela en viviendas públicas para personas mayores

antigua escuela Miguel HernándezEl Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet rehabilitará la antigua escuela Miguel Hernández para construir un centro con 48 viviendas públicas con servicios compartidos para personas mayores de 65 años, el primero de este tipo que se hace en la ciudad.

La alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlon, ha explicado que con este tipo de viviendas buscan promover “un modelo de envejecimiento activo en el que las personas mayores puedan vivir en su casa mientras tengan autonomía y no tengan que entrar en una residencia”.

El espacio tendrá en total una superficie habilitada de más de 5.300 metros cuadrados, donde se instalarán 48 pisos accesibles, para un máximo de dos personas cada uno, y cinco viviendas adaptadas para personas conmovilidad reducida, así como una zona exterior de 2.000 metros cuadrados con aparcamiento zona verde.

Además, el edificio dispondrá de una zona de servicios comunes, con una conserjería disponible las 24 horas del día, y 264 metros cuadrados de la planta baja que funcionarán como centro de día con una capacidad para 20 personas, que complementan las 30 plazas de día que ya hay en la residencia Ramón Berenguer.

Parlon ha señalado que el plan ejecutivo de rehabilitación del espacio se aprobará en abril, se adjudicará en mayo y empezarán las obras en juniode este año, con la intención que esté finalizada su rehabilitación en el segundo trimestre de 2019 y que las primeras personas mayores puedan entrar a vivir de cara al verano de 2019.

Las bases para acceder a estas viviendas públicas aún no están definidas, pero la alcaldesa ha adelantado que serán requisitos básicos “que sean personas mayores de 65 años, empadronadas en Santa Coloma y que vivan en viviendas que no sean accesibles”. Además, se tendrán en cuenta otros baremos como el nivel de renta y la situación de vulnerabilidad social de la persona mayor.

Este parque de viviendas públicas ha sido posible por el trabajo conjunto del consistorio con la asociación de vecinos del barrio de Can Calvet y la plataforma Som Gent Gran, que reunió más de 3.000 firmas para exigir la construcción de una segunda residencia para ancianos y el aumento de las plazas de centros de día.

La alcaldesa ha explicado que en la ciudad los mayores de 65 años representan casi el 20% de la población (23.545 personas), de los que 4.023 son personas mayores con algún tipo de ayuda de servicios de atención domiciliaria, desde apoyo en tareas cotidianas, atención a casos de soledad e incluso apoyo alimentario.

Fuente: La Vanguardia

 

 

FSC logra la gestión en Altea de 38 viviendas sociales para personas mayores hasta el año 2055

CEAM-AlteaLa Fundación Salud y Comunidad (FSC), en consorcio con la Asociación Lagunduz, iniciará a partir de este mes de marzo la gestión de 38 viviendas destinadas a personas mayores, residentes en el municipio alicantino de Altea. Ello ha sido posible tras el acuerdo alcanzado, por una parte, con la Administración Concursal que representaba a la anterior gestora, la Fundación Nuestros Mayores de Altea, tras entrar ésta en un proceso de liquidación concursal y, por otra, con el ayuntamiento de la localidad.

FSC, tras casi dos años de negociaciones con la Administración Concursal, así como con la entidad financiera propietaria de la concesión del equipamiento, ha obtenido los derechos de gestión de estas viviendas, contando para ello con la aprobación del Ayuntamiento de Altea.

Estas viviendas están destinadas a personas mayores de 60 años que, por diferentes circunstancias sociales, personales y/o económicas, no tienen acceso a una vivienda normalizada y requieren de este servicio específico.

En cuanto al perfil de residente, algunos usuarios/as cuentan con condiciones de salud óptimas que les permiten mantener su autonomía personal en estas viviendas, si bien otros precisan de servicios complementarios.

Los mayores, además de recibir una vivienda en la que poder alojarse a cambio de un alquiler social bajo, perciben otras prestaciones que les permiten mejorar su calidad de vida, contando con una atención profesional continuada, así como con prestaciones a nivel de limpieza y de mantenimiento doméstico.

En cuanto a las características de las viviendas, cuentan con aproximadamente 45m2 de superficie por apartamento y pueden ser de uso individual o doble, residiendo en estos momentos en ellas un total de 46 mayores en 37 de los 38 apartamentos.

El servicio cuenta también con espacios comunes, a modo de salas, que permiten la convivencia entre los vecinos/as, a través de la realización de actividades grupales o la participación en juegos, además de actividades individuales como la lectura.

Por otra parte, cabe señalar que estos apartamentos están ubicados en las plantas superiores -primera y segunda- del CEAM (Centro Especializado de Atención a Mayores) de Altea, gestionado también por FSC, pudiéndose beneficiar los residentes de los servicios que se ofrecen en él.

El CEAM de Altea es un centro de atención preventiva destinado a proporcionar apoyo y asesoramiento integral que ayude a los mayores a encontrar los recursos necesarios, mediante la coordinación con los servicios sociales generales, así como a realizar una medicina preventiva.

Por último, queremos destacar que el entendimiento entre las partes y los valores que guían el trabajo de FSC, han ayudado a evitar que los mayores que residen en estas viviendas, se vieran en una situación compleja y de posible desamparo. Ello parecía inevitable, si no hubiera surgido ninguna entidad, como ha sido el caso de la Fundación Salud y Comunidad, que con su labor va a dar continuidad a la gestión de este servicio.

Fuente: e-noticias FSC

El Govern destina la promoción de 40 viviendas de Mahón a fomentar la convivencia de personas mayores y jóvenes

viviendas mayores mahonEn 2018 se iniciará la construcción de 3 promociones que sumarán un total de 62 viviendas, con una inversión de 6 millones de euros.

La presidenta del Govern, Francina Armengol, acompañada del conseller de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, ha visitado este sábado el solar en el que se ubicarán 40 viviendas destinadas a fomentar la convivencia de personas mayores y jóvenes, siendo esta una de las tres nuevas promociones de vivienda pública que incluye el Plan de Vivienda 2017-2020 para Menorca.

Asimismo, ya se ha solicitado la licencia al Ayuntamiento y la previsión es que las obras puedan empezar el mes de abril de 2018, con un plazo de ejecución de 21 meses, según ha explicado el Govern en un comunicado.

Armengol ha valorado positivamente la política de vivienda del Ejecutivo balear, que ha pasado toda la vivienda pública al alquiler social, para que sea más accesible para las familias. Además, ha destacado «la apuesta, a través del Pla d’Habitatge, por aumentar la vivienda pública en Baleares».

Por su parte, el conseller Pons ha indicado que se está dando respuesta a una «asignatura pendiente». «Pensando en segmentos de población muy concretos: gente mayor que vive sola y gente joven que se quiere independizar», ha añadido.

Así, donde actualmente hay 213 viviendas de protección pública, en 2018 se iniciará la construcción de tres promociones que sumarán un total de 62 viviendas, con una inversión de 6 millones de euros.

De este modo, se trata de una promoción de 38 viviendas de 45 metros cuadrados (3 de los cuales son adaptados) y 2 de 60 metros cuadrados.

Es una promoción de carácter dotacional, destinada inicialmente a personas mayores y, por eso, la construcción consta -además de los pisos- de distintos espacios; los locales situados en la planta baja estarán destinados a servicios, como por ejemplo comedor, servicio de fisioterapia, sala multiusos o sala de conferencias.

El Instituto Balear De La Vivienda (Ibavi) tiene previsto destinar una parte de estas viviendas (la mayoría de las cuales son apartamentos con una habitación y 2 de dos dormitorios) a jóvenes que o bien estén cursando estudios relacionados con la tercera edad o tengan la voluntad de cuidar de los vecinos mayores.

De esta manera, Mahón podría contar con un edificio de viviendas de protección pública que pondrá al alcance de las personas mayores viviendas con servicios y, a la vez, facilitará el acceso de los jóvenes a las viviendas en un espacio de convivencia intergeneracional.

Una vez construidas las viviendas, el Ibavi fijará los criterios para seleccionar, de entre los solicitantes de viviendas, los que podrán acceder a ellas.

Otro de los proyectos consistirá en la promoción de 18 viviendas ubicada en la calle Borja Moll de Maó/esquina con Roca Próxima, siendo una construcción en un solar del Ibavi de 441 metros cuadrados cuyo presupuesto es de 1,8 millones de euros. Las obras empezarán el próximo mes de febrero de 2018 y el plazo de ejecución es de 15 meses.

La tercera promoción tratará de 4 viviendas en Sant Lluís en un solar de 302 metros cuadrados y con un presupuesto de 488.916 euros. Se prevé el inicio de las obras el próximo mes de enero con un plazo de ejecución de 12 meses.

Por último, a la visita también ha participado la presidenta del Consell de Menorca, Susana Mora; la alcaldesa de Mahón, Conxa Juanola, y el director general de Vivienda, Eduard Vila.

Fuente: La Vanguardia

En España hay 34 grupos de covivienda colaborativa entre personas mayores

Viviendas-Bilbao-933x445En España hay actualmente 34 grupos de vivienda colaborativa para personas mayores, de los que seis están en Cataluña, y el perfil de su usuario es el de una mujer, culta, de profesión maestra o enfermera y de más de 65 años, según un estudio presentado hoy por la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).

La covivienda, llamada también ‘cohousing’, son proyectos de viviendas para fomentar la vida en comunidad, la ayuda mutua y compartir los servicios asistenciales entre personas mayores.

Según el estudio MOVICOMA, el primero que se hace en España sobre covivienda sénior, evitar sobrecargar a los familiares o la percepción negativa de las residencias son algunos de los motivos por lo que escogen este nuevo modelo de convivencia.

El estudio, que ha seguido a 13 de los 34 grupos existentes, ha establecido que el perfil medio de los usuarios de la covivienda es el de una mujer, con nivel educativo medio-alto y que trabajaba en los ámbitos de la educación, de la sanidad o de entidades sociales, y ha comprobado que por cada 10 mujeres hay 3,5 hombres viviendo en «cohousing» en España.

Las primeras experiencias en España de esta convivencia sénior se remontan al año 2000, recuerda el estudio, que se ha presentado esta mañana en una jornada organizada por el grupo de investigación CareNet (Care and Preparedness in the Network Society) del IN3-UOC, liderado por el investigador Daniel López Gómez.

«La capacidad de decidir cómo se quiere vivir la vejez y poner en práctica nuevas maneras de hacernos cargo colectivamente de este proceso vital es uno de los puntos distintivos de estos grupos», ha explicado López.

El estudio ha revelado que el principal motivo para vivir en un proyecto de vivienda colaborativa es «envejecer con autonomía, compartir y vivir en comunidad y disponer de un entorno y unos servicios adecuados».

«Sólo tiene sentido ser activo cuando puedo decidir», ha resumido López, que destaca que las personas que deciden esta forma de vivir «tienen un capital social, cultural y político que les permite sacar adelante proyectos exigentes como estos de manera autogestionada».

«Forman grupos con experiencias y estilos de liderazgo diferentes, pero acostumbran a funcionar todos de una manera muy participativa y se constituyen en cooperativas», ha detallado López.

El investigador ha afirmado que las personas que escogen el ‘cohousing’ lo hacen porque ven que los trabajos de cuidado de mayores son insostenibles en las familias y generan formas de explotación que sufren especialmente las mujeres.

También afecta la reducción de la familia nuclear y de las redes de apoyo, el retraso de la maternidad y paternidad, los cambios laborales y la creciente movilidad social, que hacen que las personas que se hacen mayores no quieran ser una carga para sus hijos.

Al mismo tiempo, el estudio señala que cada vez hay más personas sin hijos, solteras o divorciadas que buscan alternativas de futuro «ante un estado del bienestar en crisis».

Otra de las motivaciones es, según el trabajo, «la percepción negativa de las residencias y centros geriátricos».

«En la mayoría de casos no pueden acceder a una plaza pública, pero tampoco pueden asumir el coste de una residencia privada, y ven esta opción como el primer paso para perder la autonomía personal y, por tanto, la dignidad», ha asegurado López.

«También la opción de envejecer en casa se percibe como una opción de soledad. La posibilidad de vivir en comunidad representa la capacidad de ampliar el círculo social, y hay una necesidad de continuar activo después de la jubilación. Iniciar un proceso de covivienda tiene un componente de emprendedoría fuerte, lo que permite a muchas personas continuar haciendo vida activa personal, social y políticamente», ha concluido López.

Fuente: La Vanguardia

La Comunidad de Madrid impulsa un Programa de Viviendas Compartidas para personas mayores

mayores-1-300x176La Comunidad de Madrid va a impulsar un Programa de Viviendas Compartidas para personas mayores, basado en la ayuda mutua, que pretende dar respuesta a las necesidades de compañía y apoyo de muchas personas mayores de la región, así como a necesidades de alojamiento. Esta es una de las medidas recogidas en la Estrategia de Atención a las Personas Mayores de la Comunidad de Madrid 2017-2021, dotada con un presupuesto estimado de 6.790 millones de euros, que ha sido aprobada por el Consejo de Gobierno. La vivienda a compartir será de una de las personas mayores interesadas en participar en este programa, de manera que compartir piso se convierte en una oportunidad para lograr un estilo de vida que conduce a un envejecimiento activo en compañía de otras personas. El objetivo fundamental es promover y facilitar el contacto entre personas mayores que buscan compartir vivienda además de otros servicios adicionales (limpieza, transporte o asistencia sanitaria en el hogar), así como los gastos que se generan en ella.

Este programa va dirigido a personas mayores de 65 años, autónomas y que cumplan una serie de requisitos, como disponer de una vivienda en propiedad, en buenas condiciones de habitabilidad y con suficiente espacio para ser compartida; que la persona que vaya a compartir no disponga de vivienda en propiedad o esté en malas condiciones de habitabilidad; y residir en la Comunidad de Madrid y haberlo hecho, al menos, durante el año anterior a la solicitud.

De esta manera, se consigue mantener a las personas mayores en su entorno habitual; disminuir la sensación de soledad y aislamiento que sufren muchas de las personas mayores que viven solas; optimizar los propios recursos económicos o materiales; y paliar posibles problemas económicos.

Medidas distribuidas en cinco líneas estratégicas

La Estrategia de Atención a las Personas Mayores de la Comunidad de Madrid 2017-2021 se estructura en cinco líneas estratégicas, que se concretan en 21 objetivos específicos: promover medidas enfocadas el envejecimiento activo y a la prevención de situaciones de dependencia; promover medidas para la atención a personas mayores autónomas en dificultad social; desarrollar un catálogo de servicios y prestaciones para personas en situación de dependencia; mejorar la coordinación sociosanitaria en el ámbito de la atención a la dependencia y al mayor; y desarrollar una organización integrada e innovadora en la prestación de servicios públicos.

Para ello, la Estrategia cuenta con un total de 129 medidas dirigidas a las personas mayores y a personas en situación de dependencia de la región, con el fin de que puedan vivir de la forma más activa y saludable posible. Además del Programa de Viviendas Compartidas, la Estrategia Madrileña de Atención a las Personas Mayores incluye otras medidas destacadas como el desarrollo de una “Ruta Socio-Sanitaria”, con la creación de un marco en el que los sistemas públicos de Salud y de Servicios Sociales trabajen de manera sinérgica y conjunta.

A este respecto, se va a invertir este año 1,5 millones de euros en un Centro Socio-Sanitario piloto para mayores de 65 años o menores de esa edad con necesidades de atención por razones de enfermedad, discapacidad o dependencia, en el que se valorarán las situaciones que indican las necesidades de atención y se definirán los servicios idóneos para las distintas situaciones, en virtud de criterios clínicos, funcionales y sociales.

Descuentos en espectáculos y actividades culturales

Por otra parte, se facilitará a las personas mayores de 65 años el acceso a espectáculos y actividades culturales, con descuentos en entradas, con el fin de promocionar el envejecimiento activo. Con este fin se consignará una partida de 2 millones de euros en el presupuesto del año 2019.

Igualmente, se fomentará el envejecimiento activo y la prevención de situaciones de dependencia mediante programas, actividades y talleres para seguir manteniendo la esperanza de vida más alta de todas las comunidades autónomas de España (84 años).

Por otro lado, la Comunidad de Madrid va a facilitar un servicio telefónico de orientación y apoyo psicológico para personas mayores, atendido por una red de profesionales; y promoverá la comunicación de estas personas a través de las nuevas tecnologías en la vida diaria, como WhatsApp o Skype.

Además, el Gobierno regional va a promover un Programa Interuniversitario para Personas Mayores, con participación de cinco universidades públicas de la Comunidad de Madrid (Alcalá, Complutense, Carlos III, Autónoma y Rey Juan Carlos). Cada universidad ofrecerá seminarios de excelencia, cuyos contenidos estarán relacionados con el fomento de la creatividad, el desarrollo personal, la cooperación y el voluntariado. Los alumnos podrán acceder a los contenidos de excelencia incluidos en el programa de cada universidad.

Atención a mayores en dificultad social

Respecto a la atención a personas mayores autónomas en dificultad social, la Comunidad de Madrid mejorará y promoverá servicios, programas, recursos y prestaciones como pisos tutelados, acogimiento familiar, estancias temporales en residencias y viviendas compartidas.

Otras medidas destacadas de la Estrategia hacen referencia a acciones de apoyo a cuidadores de familiares de personas en situación de dependencia (a través de programas de formación y respiro familiar); la mejora de los servicios y prestaciones para personas en situación de dependencia; el establecimiento de estándares de calidad para cada uno de los servicios incluidos en el catálogo de prestaciones para atención a la dependencia; o la dinamización de la vida cotidiana de los usuarios de residencias y centros de día con plazas públicas, entre otras.

Fuente: Aquí en la Sierra

Desbloqueado el proyecto de 35 apartamentos para mayores en el barrio toledano de Santa María de Benquerencia

ApartamentosTolIntEl concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo, Teo García, se ha reunido este viernes con los responsables de la cooperativa Vitápolis tras desbloquearse el proyecto para la puesta en marcha de un complejo residencial compuesto por 35 apartamentos destinado a personas mayores, con un modelo en el que se comparten servicios sociosanitarios aparte de los espacios de uso común.

El arquitecto Mariano Vallejo ha sido el encargado de exponer las líneas generales de esta iniciativa que, tras diversas vicisitudes, sale adelante ahora «con el apoyo del Gobierno local», que respalda este proyecto al compartir los objetivos que persigue en el ámbito del envejecimiento y bienestar de los mayores, ha informado el Consistorio toledano en nota de prensa.

Se trata de un modelo de convivencia con la construcción de un complejo con 35 apartamentos en el que los usuarios dispondrán de sus dependencias privadas, garajes, trasteros y una zona de espacios comunes con salón de juegos, comedor, gimnasio, jardines, así como los servicios sociosanitarios que precisen para garantizar la calidad de vida de sus habitantes.

El edificio, que se levantará en Santa María de Benquerencia, será totalmente accesible y dispondrá de elementos ergonómicos adaptados a las necesidades de los vecinos, tanto en los apartamentos como en las zonas comunes, facilitando así la vida cotidiana a las personas con movilidad reducida o que sufran algún tipo de impedimento físico.

Fuente: EL DIGITALCLM

 

La Comunidad de Madrid estudia poner en marcha un programa para que personas mayores compartan vivienda

  • juan-mayores-solos-kXy--620x349@abcAncianos que acogen a ancianos
  • El objetivo, mitigar la soledad y compartir los gastos del día a día

Hay un día en el que un olor intenso inunda el portal. Poco tiempo después, se hace insoportable. Uno de los vecinos cae en la cuenta de que, hace varias jornadas que no ve a la señora mayor del quinto. El asunto suele acabar de forma dramática, como la típica historia desgraciada, con los bomberos derribando la puerta del piso de la anciana y a los trabajadores del Anatómico Forense introduciendo el cuerpo en el furgón.

«Donde mejor están los mayores es en su casa», asegura Carlos González, director general de la Dependencia y el Mayor. Él es consciente de que hay muchos ancianos que no quieren ir a un residencia. Ante esta realidad, la Consejería de Políticas Sociales y Familia estudia poner en marcha un programa para juntar a los mayores. Es decir, unir a dos personas que viven solas en sus pisos para que se den compañía y compartan gastos.

A lo largo de este año, la Comunidad tiene previsto elaborar un estudio que analice las necesidades de alojamiento de las personas mayores. La idea es comprobar si es viable la creación de un programa de viviendas compartidas.

«La vivienda a compartir será la de uno/a de los interesados/as en participar en este programa. Pretendemos mantener a las personas mayores en su entorno habitual, para disminuir la sensación de soledad y aislamiento que sufren muchas de las personas mayores que viven solas. A la vez, se puede optimizar los propios recursos económicos y/o materiales y, finalmente, paliar posibles problemas económicos», precisa el director general.

El programa va dirigido a las personas mayores de 65 años que se valgan por sí mismos y que cumplan una serie de requisitos. Por ejemplo, que una de las personas disponga de una vivienda en propiedad, en buenas condiciones de habitabilidad y con suficiente espacio para ser compartida. La persona que vaya a compartir no puede disponer de un piso en propiedad o si tiene uno ha de estar en malas condiciones de habitabilidad.

Finalmente, en esta planificación inicial, la persona ha de residir en la Comunidad de Madrid o haberlo hecho, al menos, durante el año anterior a la solicitud.

El programa está aún por concretar detalles. Por ejemplo, todavía no está claro si el que hace la elección del inquilino es el propietario de la vivienda entre un grupo de candidatos o la Administración. «Nosotros, en cualquier caso, buscaríamos compatibilidades», señala González. «Compartir piso no es sólo una alternativa a la institucionalización, sino que se convierte en una oportunidad para lograr un estilo de vida que conduce a un envejecimiento activo en compañía de otras personas», dice.

Este objetivo de promover, fomentar y facilitar el contacto entre personas mayores que buscan compartir vivienda supone, además, un reparto de los gastos de limpieza, transporte o asistencia sanitaria en el hogar, así como los propios del día a día, precisa. El director general recuerda que hasta la fecha, la Comunidad de Madrid dispone de una red de pisos tutelados, compuesta de 617 plazas para personas mayores con problemas de alojamiento.

Asimismo, apunta que la Administración regional dispone de una red de plazas de residencias «para personas mayores autónomas que cubren sus necesidades de alojamiento y asistencia, por lo que la creación de este nuevo programa nos exige analizar las necesidades no cubiertas para este sector de población, y explorar nuevas respuestas a sus necesidades de alojamiento», asegura.

Fuente: El Mundo